Esta mañana se desarrolló en La Moneda una reunión de coordinación del alto mando de Carabineros y la Policía de Investigaciones (PDI) con la ministra del Interior, Izkia Siches, y el subsecretario de la cartera, Manuel Monsalve, con el fin de abordar el agravamiento de la violencia en la Macrozona Sur.

Además de la confirmación por parte de la titular de Interior de que no se repondrá el Estado de Excepción en la zona, el subsecretario Monsalve detalló por su parte las medidas “estratégicas” y “operativas” para enfrentar la violencia que pretende adoptar el Gobierno en la Macrozona Sur. 

La primera de ellas apunta a «fortalecer las medidas de seguridad en la zona». En este contexto, el director de Orden y Seguridad de Carabineros, general Marcelo Araya, visitará el Biobío y La Araucanía para «tomar medidas inmediatas y directas para mejorar las condiciones de seguridad en las rutas» con los generales de zona, las cuales «van a ser visibles, palpables y eficaces para la seguridad de los ciudadanos», explicó la autoridad de Gobierno. 

En segundo lugar, se destinarán recursos de 5.500 millones de pesos para la compra de «un conjunto de equipamiento para mejorar las condiciones de seguridad en ambas regiones y eso se va a hacer en conjunto con los gobernadores«, añadió. 

Dentro de ello, el subsecretario adelantó que se informará próximamente acerca de medidas en materia de obras públicas en las rutas del sur del país, con la idea de «mejorar las condiciones de seguridad en las carreteras concesionadas«. 

En tercer lugar, Monsalve señaló que «se nos ha pedido fortalecer las políticas del Estado para poder atender de manera oportuna a quienes eventualmente son víctimas de hechos de violencia», por lo que se va a incorporar a «aquellos que estaban fuera de la política de reparación, como lo eran los conductores de los medios de transportes.

En este sentido, acotó que «consideramos que esta es una medida que muestra la preocupación del Gobierno también por las víctimas con quienes empatizamos».