1. Ahorrarás dinero

Multiplica el precio por la cantidad de paquetes de tabaco que consumes en un mes. ¡Anda, qué dineral! Con semejante cantidad de pasta podrías haber arrasado en la tienda online de Men’s Health…

2. Vivirás más

Un día sin fumar ya puede alargar tu vida. Pero eso no es todo. Conoce de qué forma te cambia la vida cuando dejas el tabaco…¡No es moco de pavo!

3. Tu aliento, ropa y cabello olerán mejor

La gran cantidad de sustancias que lleva un cigarrillo (nicotina, monóxido de carbono, alquitrán…) desprenden un fuerte olor. Si los quitas de tu vida, el olor que desprenderás será mucho más agradable.

4. Tu sentido del olfato volverá a funcionar y los alimentos sabrán mejor

Según la American Academy of Otolaryngology, fumar produce daños en los nervios olfativos, lo cual se traduce en una menor percepción de los olores que puede volverse permanente.

5. Tus dedos y uñas de las manos lentamente perderán el color amarillo

La nicotina afecta directamente a tu cuerpo, ya que acaba dejándote su rastro en las manos, que adquieren un tono más amarillento.

6. Tus dientes manchados lentamente se pueden volver más blancos

Al ser la puerta de entrada en el organismo, la boca es la gran perjudicada. La propia nicotina puede ser muy nociva tanto para los dientes como para las encías.

7. Tus hijos estarán más saludables y serán menos propensos a empezar a fumar

Inhalar el humo es siempre desaconsejable, más aún a una una temprana edad, ya que se convierte a los niños en fumadores pasivos por fuerza mayor. Y eso puede predisponerlos a fumar por el hecho de considerar que es algo normal.

8. Tendrás más opciones de encontrar pareja

Como hemos dicho, fumar provoca mal aliento, unos dientes amarillentos y otros efectos sobre el cuerpo que pueden ser un hándicap a la hora de conocer a otra persona, ya que le pueden resultar desagradables.

9. Te será más fácil y más barato encontrar un apartamento o cuarto de hotel

El tabaco está cada vez más capado en la mayor parte de ámbitos, así que si sigues fumando, tendrás problemas para encontrar espacios habilitados para fumar.

10. Tus amigos tendrán más disposición para entrar en tu coche o tu casa

El desagradable olor del tabaco queda impregnado no sólo en tu cuerpo, sino también en las paredes de tu casa y en la tapicería de tu vehículo. No dejes que te critiquen a las espaldas por el pestazo de tus posesiones.