La ministra del Interior, Carolina Tohá, condenó la violencia que se han producido los últimos días con las movilizaciones estudiantiles, indicando que a pesar de que las personas tienen derecho a manifestarse no existe el derecho de quemar buses y romper semáforos.

“Desde el Ministerio del Interior, tenemos como primer propósito reconducir la forma en que llevamos la convivencia de nuestro país por un cauce de respeto. Y respeto significa que los derechos de personas se pueden ejercer, ciertamente entre ellos está el derecho a la manifestación, pero el derecho a quemar buses y a romper semáforos no existe”, señaló a radio Cooperativa.

Tohá dijo que como Gobierno hay que buscar la manera de reconducir la forma en que se ejerce dicho derecho a manifestarse como también otros sociales que permitan respetar a los demás y “eso no sólo significa reafirmar los derechos, sino que también reafirmar que hay límites. En la sociedad chilena se han estado rompiendo muchos límites y creo que hay que hacerlos cumplir y si hay discusión sobre esos límites, hay que discutirlos”.

La jefa de gabinete aseguró que es necesario establecer los límites entre lo que es una manifestación legítima y lo que es violencia, afirmando que “si alguien cree el derecho a quemar buses, lo invito a proponer su punto de vista y le aseguro que esos argumentos son inexistentes, y que los argumentos del Gobierno aquí va a ser muy firmemente que este límite no puede pasar y que nosotros vamos a emplear las herramientas legítimas que tiene el Estado para que esos límites se restituyan”.

“Desde el punto de vista operativo creo que ha habido bastantes mejorías en las formas que se enfrentan estas situaciones, todavía nos faltan algunas mejorías (…) pero puede decir que hay detenidos, que ha habido una actuación policial que ha estado dentro de los límites aceptables, puedo decir que los intentos de paralizar la ciudad, ayer no se logró”, explicó.

En cuanto a si las movilizaciones que se han registrado últimamente pueden derivar en un nuevo estallido social, indicando que “creemos de manera muy contundente que esta situación es muy diferente de la que hubo cuando se desarrolló el estallido social y creo que es más importante, y la reflexión que todos deberíamos hacer, es que el estallido social fue una expresión ciudadana de cambios en la sociedad, y que acabamos de tener un tropiezo gigantesco en el proceso constitucional a propósito de esos cambios”.

Añadió que “si queremos ser coherentes con lo que nos dijo la ciudadanía en ese estallido, lo que necesitamos, sin duda alguna, no es otro estallido, sino dar respuesta a esas demandas ciudadanas construyendo mayorías (…) y quemar buses o romper semáforos no ayuda a crear mayorías y generar esos cambios sociales. Creo que ningún elemento hoy día está para que se genere un nuevo estallido social, pero los incidentes no tienen que estallar y llegar al nivel de estallido social para ser molestos y causar daños y eso lo tenemos que evitar”.

En cuanto a la violencia, Tohá explicó que los desórdenes están siendo generados por grupos radicalizados que no tienen demandas claras y buscan un ambiente de tensión previo al 18 de septiembre.

“El problema es que se está interrumpiendo el Metro sin ninguna demanda clara, sin haber intentado ningún diálogo con la autoridad y sin haber planteado ninguna solución que no sea interrumpir el Metro. Entonces, no es un camino y creo que gran parte de los grupos que están haciendo estas acciones no están buscando una demanda, están buscando generar un ambiente previo al 18 de octubre y el Gobierno, en ese sentido, no va a confundirse entre las legítimas demandas estudiantiles con las estrategias de grupos radicales que quieren generar un clima de tensión”, concluyó.