Israel e Irán protagonizaron el domingo otra jornada de intensos ataques aéreos cruzados, en la cuarta noche de un conflicto que ya ha dejado decenas de muertos y centenares de heridos entre ambos bandos.
Israel apuntó a instalaciones militares y depósitos de combustible en en diversas ciudades iraníes, incluyendo «decenas» de ataques contra infraestructuras que albergan misiles en el oeste de Irán.
El ejército también anunció la destrucción de un avión iraní de reabastecimiento de combustible en el aeropuerto de Mashhad, cercano a la lejana frontera con Afganistán, así como objetivos en Teherán, como la sede del Ministerio de Defensa y la llamada Organización de Innovación e Investigación Defensiva, que se considera el corazón del proyecto iraní para construir armas nucleares.
Mientras miles de iraníes huyen de la capital, y las tiendas de provisiones son vaciadas aceleradamente por ciudadanos que temen la extensión sin fecha de término de los ataques, el régimen de Teherán confirmó oficialmente la muerte de sus más altos jefes de Inteligencia, mientras en paralelo anunciaba la muerte de al menos 224 personas, el 90% de los cuáles, según fuentes gubernamentales, corresponden a civiles, y más de un millar de heridos.
Ataques de represalia contra Israel
En tanto, Irán lanzó una nueva andanada de misiles hacia Israel que alcanzaron varios puntos del país, según el ejército israelí.
Las ciudades que han sufrido el mayor número de ataques son Tel Aviv y Haifa, localidad donde fue impactada una refinería de petróleo.
Fuentes israelíes han confirmado hasta ahora 13 muertos y al menos unos 200 heridos a causa de los ataques iraníes.
(Información vía Deutsche Welle, France24, AFP, AP y Reuters)