El exdirector nacional del Senapred, Álvaro Hormazábal, cuestionó la victimización que han hechos los municipios de Viña del Mar y Quilpué tras los voraces incendios que afectaron durante febrero la región de Valparaíso, indicando que las alcaldesas que lideran esas comunas –Macarena Ripamonti (RD) y Valeria Milipillán (CS)– han tenido una capacidad de desligarse de las responsabilidades y que debieran dejar de hacerse las víctimas.
Hay que recordar que el fin de semana el Gobierno solicitó la renuncia Hormazábal, afirmando desde el Ejecutivo que su salida “se enmarca en la necesidad de darle un nuevo impulso al organismo en el marco de las distintas emergencias que ha debido enfrentar el país”.
En conversación con radio Cooperativa, Hormazábal dijo que “aquí hay una falencia principal, que los municipios no han cumplido, que es desligarse de la responsabilidad que ellos tienen, y pasar de ser responsables a hacerse las víctimas, y hacer que el Estado y el Gobierno asuma roles y actividades que no les corresponden”.
“Para nosotros ha sido bien complejo, porque, siendo que ellos tienen más de 2.000 funcionarios, nosotros, como Senapred, con 16 funcionarios (jefes en regiones), hemos tenido que estar asumiendo roles y tareas que del nivel municipal se deberían hacer”, explicó.
Sin embargo, Hormazábal destacó la labor del municipio de Villa Alemana, donde la alcaldesa Javiera Toledo trabajó a la par con el Senapred.
“Desde el momento en que ocurrió la emergencia, cuando fui al terreno, conversé con la gente y me dijeron ‘aquí llegaron los camiones municipales, nos evacuaron, nos ayudaron a salir’. Después tuvimos que armar las casas de emergencia, la alcaldesa nos puso a disposición: ‘aquí están los terrenos para que ustedes construyan’, y en dos días -eran menos casas- construimos 18 casas en dos días (…) Trabajamos a la par con ellos”, recordó.
En ese sentido, mencionó que “tuvimos que mandar a más de 40 funcionarios de nuestro servicio -un servicio que tiene pocos funcionarios, a lo largo del país somos 400- a terreno, desde los abogados a los que hacen la orden de compra. Tuvimos que dejar de hacer compras para poder ir a buscar terrenos donde construir, porque no teníamos un terreno, nadie nos asignaba, nadie nos decía aquí construyan”.
“Tuvimos que ir a buscar, a hacer un barrido con una serie de funcionarios que se pusieron a disposición de otros organismos del Estado. De ahí tuvimos que hacer el levantamiento del lugar puntual y priorizar nosotros, siendo que a nosotros el municipio nos tiene que decir: ‘necesito la casa acá’. Tuvimos que hacer ese trabajo, terminar de hacer las instalaciones de los servicios, algo que nosotros nunca habíamos hecho”, insistió.
Respecto a si los municipios de Viña del Mar y Quilpué quedaron paralizados durante los incendios, el exdirector de Senapred apuntó que “totalmente; los primeros días estaban totalmente colapsados. No sabían qué realizar y ahora están en una etapa donde dicen ‘yo necesito que me atiendan, que me ayuden. Yo soy víctima y el Estado tiene que venir a ayudarme’. Yo creo que eso es complejo, porque así el sistema no puede funcionar. Ellos son parte del sistema que tiene que ser parte de la respuesta”.
En cuanto a su salida del organismo y las razones que tuvo el Ejecutivo para removerlo, Hormazábal dijo que “no hubo una razón puntual que me pudieran decir; (señalaron que había una) falla en la estructura y que alguien debía asumir la responsabilidad de esa falla en la estructura”.