Hay que estar atentos a signos de deshidratación como jadeo intenso y vómitos. Es clave tenerle agua fresca y limpia a su libre disposición.
En este verano marcado por altas temperaturas, los perros deben tomar suficiente agua para evitar la deshidratación y complicaciones de salud.

Se estima que un perro debe beber entre 30 y 100 ml de agua por kilo de peso corporal al día.

“Como su tutor humano, puede requerir más agua para hidratarse y refrescarse cuando está expuesto a temperaturas extremas. Cuando el calor aumenta, el perro jadeará para regular su temperatura, perdiendo líquido principalmente mediante el vapor del jadeo, y también por la sudoración a través de sus cojinetes o almohadiillas plantares”, explica Catherine Soto, médico veterinario de Laboratorio Drag Pharma.

Un tutor puede notar que su perro se está deshidratando cuando jadea de manera intensa, tiene encías secas y pegajosas, saliva espesa, pierde el apetito y la energía, vomita, tiene orina más oscura que lo habitual, ojos hundidos, pierde elasticidad en la piel pues al coger entre los dedos entre los omóplatos y soltarla no recupera inmediatamente su forma.

La deshidratación puede provocar al perro una insuficiencia orgánica, cálculos renales, reducción del flujo sanguíneo y cantidad de oxígeno en los órganos.

Agua limpia

Para estimular al perro a que beba agua en días de calor y mantenerlo hidratado, la experta aconseja:

• Tener agua a su libre disposición para que beba cuando necesite. Si el perro queda solo durante el día, colocar varios recipientes con agua en distintos lugares del hogar.

• Mantener el agua fresca, colocando hielo en los pocillos de agua, lo que ayudará a que esté por más tiempo a baja temperatura, para que sea más refrescante y atractiva para el animal. Hay que dejar los recipientes de agua a la sombra.

• Para que el agua esté limpia y más apetecible para el perro, hay que renovarla constantemente.  Es bueno ubicar el pocillo de agua lejos del plato de alimento, para que el perro al comer no desparrame granos que ensucien el líquido. Además, hay que limpiar diariamente los pocillos.

“Cuando el agua no es fresca o acumula restos de comida, el perro podría ignorarla y comenzar a deshidratarse”, advierte Soto.

• Dar alimentos enlatados o húmedos para complementar el pellet o alimento extrusado. Las comidas enlatadas para mascotas contienen alrededor de 80% de agua, en contraste con el 10% de humedad del alimento seco.

• En caminatas con el perro, llevar bebedero portátil y dar agua de beber al can aproximadamente cada 20 minutos. Evitar salir a largos paseos en las horas de mayor calor.

En viajes en automóvil, detenerse en el trayecto para dar de beber al perro cada dos horas.

• Se puede dar “bebida isotónica” en caso de someter al perro a un ejercicio intenso, viaje en un ambiente de calor, correr largos trechos al sol o cuando el perro tiene signos de deshidratación. Las bebidas isotónicas para mascotas, como Electrovet, permiten reponer rápidamente el agua y electrolitos perdidos en el organismo del perro por jadeo y sudor.