Una vacancia cercana al 0%. Esa es la realidad que se está viviendo en relación a este tipo de bienes inmobiliarios. La falta de suelo para construir y la gran demanda de zonas de almacenaje explican este factor.
La logística ha sido todo un problema en este período de retorno paulatino a la presencialidad. La escasez de productos y el encarecimiento de los containers procedente de países exportadores ha generado que quienes comercializan los bienes se estén viendo profundamente afectados.
Desde ese punto de vista, los emprendedores nacionales han tenido que sortear, además, otros desafíos como la logística. Según datos de Colliers, la demanda de espacios de almacenaje aumentó en un 48% durante 2021, lo que en noviembre se tradujo en una vacancia cercana al 0%. Todo esto motivado por el aumento del comercio electrónico en contexto de pandemia.
Lo que sin duda se ha traducido en una piedra en el zapato para quienes necesitan de espacios de almacenaje para poder aumentar la capacidad capilaridad para llegar de manera más eficientes con los productos que se transan en el comercio electrónico.
¿Y cómo lo están haciendo los emprendedores que necesitan de estos espacios?
De acuerdo a Salvador Barros, cofundador de Kipp, quienes precisan de estos bienes se las han ingeniado “buscando otros activos que igualmente sirvan a ese propósito como galpones y subterráneos. Eso sí, no es una buena solución para empresas pequeñas y medianas, pues no necesitan algo de esas dimensiones.
“Hay muchos emprendedores que han recurrido a darkstores, a bodegas donde se subarriendan espacios y hay muchos emprendedores que llenan sus livings y espacios en las casas con sus productos”, señala Juan Pablo Oyarzún co-fundador de Ditucí, una plataforma que ayuda a pequeños y medianos productores locales en su crecimiento de e-commerce
Todos esos antecedentes de índole logístico dan cuenta de una problemática que nació en pandemia y a la que pocos se pudieron adelantar. Ya sea por el tema del transporte marítimo o la escasez de espacios de bodegaje.
