Sin duda que el servicio fotográfico del ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, debe ser uno de los más artísticos, fotos en blanco y negro, perfectamente balanceadas y que muestran al secretario de Estado, siempre sonriente, alegre, perfecto imbatible a las malas noticias de un mercado que no precisamente le sonríe al jefe de las finanzas del Estado.
Hemos elegido una veintena de fotografías oficiales del ministerio que dan cuenta de este Rodrigo Valdés, como si fuera un modelo que bien podría ser el “ministro de la felicidad”.