El país norteamericano paralizó la introducción de productos cárnicos de Brasil, a consecuencia de la incertidumbre generada por el escándalo de adulteración de carne de vacuno y pollo, reporta DW.

El Ministerio de Agricultura informó que la suspensión se mantendrá hasta que la autoridad sanitaria brasileña ofrezca evidencias científicas y garantías suficientes de la sanidad, calidad e inocuidad de sus productos.

Entre las carnes que importa México de Brasil no se encuentran productos de res ni de cerdo, sino sólo productos avícolas como carne refrigerada, congelada y deshidratada de pollo y pavo, huevo fértil, aves canoras, de ornato y rapaces, informó también el gobierno.

Sin embargo, el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) decidió restringir por precaución la introducción de esos productos. «Cuando se lanzó la alerta sanitaria internacional, el Senasica solicitó a la autoridad sanitaria de Brasil aclarar la situación respecto a adulteración de la carne», explicó el Ministerio de Agricultura.
Además, se pidió «un informe oficial completo respecto a las medidas que se están aplicando para extinguir el riesgo de que plantas avícolas que exportan a México envíen cárnicos adulterados», agregó.

México se suma a otros países que han suspendido o restringido la importación de cárnicos de Brasil. Japón también suspendió la importación de carne de pollo procedente de una de las 21 plantas bajo investigación en el caso.

Hong Kong, el segundo mayor importador de carne brasileña después de China, acordó suspender de forma inmediata y como «medida de precaución» la importación del producto. La medida se produjo dos días después de que China haya comunicado también de manera oficial la suspensión temporal de productos cárnicos de Brasil.

Chile también ordenó el cierre preventivo el pasado lunes de sus importaciones de carne brasilera. Por su parte, Uruguay suspendió la importación de carnes de tres plantas de producción brasileñas afectadas por el escándalo y Argentina incrementó sus controles de carnes procedentes de Brasil.

Suiza y la Unión Europea (UE), también aplicaron la suspensión a cuatro empresas implicadas. Mientras que los países los caribeños Trinidad y Tobago y Jamaica impusieron una prohibición inmediata de la importación de carne de res hasta que Brasil logre esclarecer la situación.

El escándalo se desató cuando las autoridades brasileñas arrestaron el pasado viernes al menos a 20 personas debido a la venta en gran cantidad de carne pasada e incluso podrida en el país, donde se vieron implicados empresarios, políticos y funcionarios públicos.

Brasil es el mayor exportador mundial de carne de res y de pollo, el cuarto en el segmento de cerdos, y las ventas externas de esos tres sectores representaron el año pasado el 7,2 por ciento de ese comercio, con un 11.600 millones de dólares.