La aplicación Snapchat está dando que hablar, ya que tiene un filtro que le permite a la gente saber qué tan rápido están viajando mientras se toman selfies.

La víctima de un accidente de auto culpa a este filtro de velocidad de Snapchat por el percance que lo dejó con heridas cerebrales traumatizantes, de acuerdo con una nueva demanda.

Se trata de Wentworth Maynard, que acusa en la demanda que estaba entrando a una autopista de cuatro carriles a las afueras de Atlanta, Georgia, cuando su auto fue golpeado «tan violentamente que lo disparó a través de carril izquierdo hasta la cuneta de la izquierda», dicen sus abogados.

Christal McGee presuntamente estaba conduciendo el auto que lo golpeó. La demanda alude que ella estaba intentando usar un filtro de velocidad de Snapchat durante el accidente.»

McGee quería publicar su imagen yendo a gran velocidad.Ella argumenta que ‘solo intentaba que el auto alcanzara los 160 kilómetros por hora para publicarlo en Snapchat'», dicen los abogados de la víctima.

Un pasajero en el auto de McGee dice que ella alcanzó los 180 kilómetros por hora en el filtro de Snapchat, agregaron. Cuando el auto chocó, la velocidad era de 172 kilómetros por hora, de acuerdo con la demanda. El límite de velocidad era de 88 kilómetros por hora.

«Mientras ella estaba distraída con su teléfono, McGee no se dio cuenta que un Mitsuhishi gris, conducido por Maynard Wentworth, había entrado a la autopista», dice la demanda.

McGee, quien también quedó herida en el accidente, aparentemente también tomó una imagen de Snapchat mientras estaba en la ambulancia, en una camilla, con sangre en su rostros.

«Suerte de estar con vida», decía la foto.

Maynard y su esposa ahora están demandando a McGee y a Snapchat para que paguen los gastos médicos. Maynard pasó cinco meses en cuidados intensivos bajo tratamientos para lesiones cerebrales severas. Él ahora necesita una caminadora o una silla de ruedas para desplazarse y no puede trabajar. Era un conductor de Uber cuando ocurrió el accidente al año pasado.

La demanda también alega que Snapchat estaba al tanto de accidentes de auto previos por usar la aplicación mientras se conducía a velocidades altas, y que la compañía decidió no quitar el filtro de velocidad.

«Esto se trata de un caso de responsabilidad del producto porque Snapchat puso algo muy peligroso en el mercado sin ningún tipo de advertencias o garantías, y básicamente dijo, lo que tenga que ocurrir, que ocurra», sostuvo T. Shane Peagler, parte del equipo legal del denunciante.

Un portavoz de Snapchat dijo que no puede comentar sobre litigios pendientes, pero agregó que la aplicación siempre incluye advertencias de no usarse mientras se conduce.