Luego de la muerte de Lissette Villa, el Servicio Nacional de Menores quedó en cuestionamiento. La «asfixia por sofocación producto de compresión mecánica externa» que involucró al caso empezó las indagatorias de distintos parlamentarios, entre ellos el independiente René Saffirio.
Según detalla CNN Chile, el 4 de mayo de 2016, Saffirio solicitó vía oficio al Director Nacional del Sename (entonces Hugo Herrera) y la otrora ministra de Justicia, Javiera Blanco, conocer los niños, niñas y adolescentes fallecidos entre el 1 de enero del 2005 y el 4 de mayo del 2016, en centros pertenecientes al Sename e instituciones privadas Cread.
Entre los datos que se encuentran en el oficio 1670, se revela que el número de niños, niñas y adolescentes muertos en 10 años en la dirección nacional del Servicio fue de 449. Respuesta que fue enviada al diputado Saffirio, Ministerio de Justicia, Dirección Nacional y la Cámara de Diputados.
Sin embargo, tres días después gracias a una reunión en el Ministerio de Justicia, la entonces secretaria de Estado, Javiera Blanco, tuvo una reunión con Hugo Herrera con el objetivo de responder al diputado Saffirio.
En esta cita, desaparecieron sobre 300 muertos y la cifra inicial de 449 fallecidos cambió a 185 niños, niñas y adolescentes muertos.
Según detalla CNN Chile, se envió un segundo informe (1699) donde se retiraron de la estadística los adultos fallecidos al interior de los recintos, además de niños, niñas y adolescentes que provenían de la justicia juvenil. Este oficio no fue firmado por la ministra Blanco, sino por el subsecretario Ignacio Suárez.
