En la actualidad las estrategias y flujos se han vuelto a dirigir a las economías desarrolladas, en desmedro de los mercados emergentes de Latinoamérica y Asia, los cuales se habían visto favorecidos los últimos meses. En este sentido, EE.UU. es la economía que se ve con mejores proyecciones internas, pero en un portafolio diversificado y con nuevas noticias macroeconómicas, por parte del Banco Central Europeo (BCE) con la extensión del programa de compra de activos, siempre es bueno mantener un porcentaje de la inversión en una región tan importante como lo es Europa, controlando desde luego los riesgos asociados.
Es difícil determinar qué país lo puede hacer mejor hoy en día, pero la economía que se ve más deteriorada dentro de la Eurozona es Italia, con su problema de crisis bancaria y la salida del primer ministro Matteo Renzi del Gobierno, y la que se encuentra en mejor pie sigue siendo Alemania. Las convicciones sobre dónde invertir, en este sentido, deben venir principalmente por los títulos que se eligen o sectores, siendo el más favorecido dada la depreciación reciente del euro y también la libra, el sector exportador.
Los riesgos como ya se comentó, vienen principalmente del ámbito político, las salidas de los países de la Zona Euro y las decisiones socioeconómicas como lo son la inmigración y los programas de refugiados. Las ventajas, por su parte, están asociadas a considerar una de las economías más relevantes en cuanto al comercio internacional y el sector exportador, con una moneda depreciada y en que las tasas aún se espera que sigan bajas.
El último año hemos estado esperando un euro más depreciado. Actualmente, eso parece estar dándose y, en ese sentido, seguimos prefiriendo las inversiones con un significativo porcentaje de cobertura al dólar, el cual esperamos se fortalezca con las nuevas medidas de Trump y la inminente alza de tasas por parte de la FED. De este modo, el euro, no se ve con una apreciación importante, más incluso considerando la extensión del programa de compras de activos por parte del Banco Central de Europa.
