La historia de Huff no comenzó tan divertida, él fue rescatado por la estudiante Carolyn Parker luego de que su dueño anterior lo sometiera a maltrato extremo.
«Mucha gente en Utah sufre depresión estacional, incluida yo,» dijo Parker a una entrevista al porta Bored Panda. «Abrí la cuenta de Instagram porque quería compartir algo que me hiciera feliz con más gente. Huff es un poco gruñón, pero por dentro es amable y adorable. Creo que por eso hay tantos fans de los erizos, porque mucha gente se identifica con ellos.»
El pequeño mamífero parece estar habituado a las cámaras, e incluso hasta posa para cada ocasión.