El precio del oro en las últimas semanas ha mostrado su milenaria fortaleza y este Viernes Santo (para el mundo Cristiano) cerró en US$ 2.254,80.– la onza.
A principios de marzo la onza ya escalaba sobre ls US$ 2.100.-, y su proyeccion sigue siendo al alza y se transforma en el «objeto» de inversión más sólido, tal como lo explica el experto en finanzas Juan Carlos Cano.