En el marco de la Convención Liubliana de Cooperación Internacional, realizada en Países Bajos, el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Luis Cordero, asistió este miércoles a la firma del tratado que representa un importante avance en la lucha contra la impunidad y la protección de los derechos humanos a nivel global.
El acuerdo establece definiciones claras de los crímenes internacionales y obliga a los Estados a cooperar en su investigación y enjuiciamiento, promoviendo la rendición de cuentas y brindando justicia a las víctimas.
El ministro Cordero señaló que, “después de 25 años de la última Convención firmada para la persecución de estos crímenes que fue la creación de la Corte Penal Internacional, nuevamente se suscribe una Convención que se discutió por más de 10 años y que tiene por propósito buscar que los Estados sean eficaces en la investigación y sobre todo en la protección de las víctimas de los delitos de lesa humanidad. Para Chile no sólo es una responsabilidad haberlo suscrito, sino que está dentro del contexto de la investigación de estos crímenes y de su política en materia de reparación de crímenes de la dictadura”.
Previamente, Chile participó de forma activa suscribiendo la Declaración Permanente en apoyo de la “MLA-Initiative”, orgánica que da origen a la Convención Liubliana, cuyo fin fue apoyar el objetivo de entablar negociaciones para alcanzar un tratado multilateral sobre asistencia legal mutua y extradición que completara la laguna existente en el marco jurídico internacional para crímenes internacionales.
El acuerdo fue firmado por 32 países en una ceremonia en el Palacio de la Paz de La Haya, que es también sede de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), máximo tribunal de la ONU. El tratado lleva oficialmente el nombre de “Convención Liubliana-La Haya” y se espera que el número de estados firmantes llegue a los 68 que acordaron el texto.
Desde el 19 de febrero, el tratado estará abierto para firma en Bruselas durante otro año, y entrará en vigor después de que los primeros tres países lo hayan ratificado.