Las últimas noticias económicas en Chile nos han traído preocupación, sobre todo en el caso de la inflación que durante marzo presentó un aumento del 1.9% mensual -lo que no sucedía hace casi 30 años-, y del 9.4% anual, siendo el registro más alto en más de 13 años.
Camila Castro, Directora de Carrera de Contador Auditor del Campus Virtual de Universidad de Las Américas, plantea que “no siendo economistas, hemos podido identificar en el mercado el aumento sostenido de los precios en recursos tan importantes como la alimentación y la educación, percatándonos que los ingresos que percibimos ya no alcanzan para lo mismo. Junto a esto, el aumento de la tasa de interés establecido por el Banco Central como medida para detener el aumento de la inflación, influye directamente en el valor de financiamiento de créditos y préstamos, siendo aún más difícil para las personas el acceso”.
Agrega que debemos además tomar en cuenta que gran parte de nuestros egresos mensuales se encuentran pactados en UF, una unidad monetaria cuyo objetivo “es preservar el poder adquisitivo”, la que aumenta día a día, superando ya los $32.000 y que varía de acuerdo con IPC. Entonces nos encontramos con créditos de consumo, hipotecarios, automotrices, seguros, plataformas digitales, aplicaciones, etc., que suben sus precios mes a mes.
Es habitual en el caso de personas con contrato de trabajo que reciban ingresos en pesos, porque eso es lo que ofrece el mercado y, además, permite al empleador mantener un costo fijo en cuanto a las remuneraciones. En cuanto a profesionales independientes ya se puede visualizar que algunos servicios están siendo ofertados en UF.
“Considerando toda la situación descrita, valdría la pena preguntarse si seguir percibiendo ingresos en pesos es sostenible y si nos dará seguridad ante un futuro inmediato en el cual no se asegura una baja o mantención de precios”, señala Camila Castro.
“Sabiendo que la oferta en cuanto a sueldos en el mercado no cambiará de un día para otro, la recomendación va hacia los profesionales independientes: oferten sus servicios en UF de manera que a medida que aumenten los precios puedan resguardar su poder adquisitivo mediante el aumento del valor de esta unidad monetaria. Asimismo, si sigue existiendo esta unidad de medida, esperemos que también el mercado considere actualizarse en cuanto a las ofertas laborales”, concluye la académica de UDLA.
