Desde que se expandió el Covid-19 por el mundo, comenzó la carrera por lograr conseguir una vacuna, y por cierto los chinos están en esa carrera que además de salvar vidas significará un megatrillonario negocio para las farmacéuticas. En esta carrera la que concita más comentarios favorables y confiables es la Vacuna ChAdOx1 – Instituto Jenner de la Universidad de Oxford el Reino Unido que se une a los desarrollos de dos laboratorios de EEUU y tres de China.
Las norteamericanas son la Vacuna mRNA-1273 – Moderna Therapeutics y la Vacuna INO-4800 – Inovio Pharmaceuticals.
Las chinas son Vacuna AD5-nCoV – CanSino Biologics, Vacuna LV-SMENP-DC del Instituto Médico Genoinmune de Shenzhen y la Vacuna de virus inactivado del Instituto de Productos Biológicos de Wuhan.
Pero la más avanzada es la creada por Oxford y que hizo una alianza con AstraZeneca tal como se anuncio el pasado 13 de junio. Por cierto Brasil, que cuenta con una filial de Astra Zeneca, realizará pruebas con esta vacuna.
¿ CanSino Biologics para Brasil y Chile?
CanSino Biologics de China está en conversaciones con Rusia, Brasil, Chile y Arabia Saudita para lanzar una prueba de fase III de su vacuna experimental para el COVID-19, dijo el sábado uno de sus fundadores, según reporta Reuters.
El éxito de China en la reducción de las infecciones por COVID-19 ha hecho más difícil la realización de ensayos de vacunas a gran escala, y hasta ahora sólo unos pocos países han aceptado trabajar con ella. Pero lo que no se dice es la desconfianza que provoca que sea los chinos los que provean de una vacuna.
“Estamos contactando con Rusia, Brasil, Chile y Arabia Saudita (para el ensayo de fase III) y todavía está en discusión”, dijo Qiu Dongxu, presidente ejecutivo y cofundador de CanSino, en una conferencia sobre el desarrollo de medicamentos antivirales en Suzhou, en el este de China.
Qiu dijo que es probable que su prueba de fase III comience “muy pronto” y que la compañía planea reclutar 40.000 participantes.
Su candidata a COVID-19, Ad5-nCov, se convirtió en la primera en China en pasar a las pruebas en humanos en marzo, pero se está quedando atrás de otras posibles vacunas en términos de avance de los ensayos.
Dos vacunas experimentales desarrolladas por Sinovac Biotech (SVA.O) y una unidad del Grupo Farmacéutico Nacional de China (Sinopharm) ya están aprobadas para ensayos de fase III.
Qiu dijo que su ensayo de fase II, en el que participaron 508 personas, ha dado resultados “mucho mejores” que los de la fase I en cuanto a la seguridad de las vacunas y la capacidad de desencadenar una respuesta inmunológica, pero no reveló pruebas específicas.
El ejecutivo dijo que su nueva fábrica en construcción en China le permitirá producir de 100 millones a 200 millones de dosis de vacunas contra el coronavirus por año a principios de 2021.
El ejército chino, cuya unidad de investigación colabora en el desarrollo de la vacuna candidata, aprobó su uso militar el mes pasado, mientras que las dos vacunas experimentales de Sinopharm se ofrecen a los empleados de las empresas estatales que viajan al extranjero.