Se especuló bastante durante la semana sobre un anuncio especialmente duro del Presidente Gabriel Boric acerca de Israel durante su cuenta pública, habida cuenta de lo informado esta semana sobre el retiro de los agregados militares chilenos ante Tel Aviv, llegándose a sugerir incluso un rompimiento abierto de relaciones diplomáticas.
Finalmente, el Mandatario optó por endurecer aún más las medidas en el ámbito de la defensa, apuntando a cortar toda relación en dicho ámbito.
Así, dio a conocer que «he instruido a la ministra de Defensa que a la brevedad me presente un plan de diversificación de nuestras relaciones comerciales en materia de defensa que nos permita dejar de depender de la industria israelí en toda área».
Junto con lo anterior, añadió que «en este sentido, respaldamos la propuesta adoptada por el gobierno de España de decretar un embargo de armas al gobierno de Israel«.
Los anuncios presidenciales fueron posteriormente explicados por el canciller Alberto van Klaveren, quien aclaró que no implicaban un corte inmediato de relaciones militares, sino que, tal y como lo señaló en el punto de prensa del pasado miércoles 28 de mayo, existiendo contratos comerciales en curso, estos seguirían vigentes hasta su vencimiento, pero no se renovarían.
No a la importación desde territorios ocupados
Previo al anterior anuncio, el Jefe de Estado, también dio a conocer en su discurso que, «considerando la permanente violación del derecho internacional por parte de Israel mediante asentamientos ilegales en territorio palestino y el reciente anuncio de expansión de esta política, he decidido que es de toda justicia patrocinar y poner urgencia el proyecto de ley que prohíbe la importación de productos producidos en territorios ilegalmente ocupados».