El ministro de Seguridad, Luis Cordero, descartó este jueves que el fiscal que investiga el caso ProCultura, Patricio Cooper, haya usado sus atribuciones para espiar al Presidente Gabriel Boric.

Así lo señaló a radio Cooperativa, rechazando la posición planteada por el Frente Amplio que acusó al persecutor de “espionaje político” contra el mandatario.

“Si hubiera espionaje, es altamente probable que yo no solo me hubiera querellado, sino que probablemente además hubiese tomado una decisión más drástica”, señaló.

Reiteró la posición dada a conocer por el Presidente respecto a que hay que dejar que las instituciones funcionen.

“Tienen que funcionar bien y nosotros lo que hemos pedido es que ese funcionamiento se realice de acuerdo a la Constitución y la ley”, apuntó.

En cuanto al “espionaje”, Cordero dijo que “yo dificulto que el fiscal Cooper o alguno de sus miembros hubiesen usado sus atribuciones para espiar al Presidente”.

“Otra cosa distinta es si las interceptaciones se hicieron en el contexto en el cual está establecida la ley”, mencionó.

Y agregó que “eso es un debate que por lo pronto hoy día ya se abrió respecto al amparo que ha interpuesto Josefina Huneeus”.

Cordero explicó que le llama la atención que la discusión se centre sobre la “frase de una filtración que es ilegal”, sin conocer los antecedentes que el fiscal usará el día de la formalización.

“Me parece que esto es lo más grave desde el punto del debate público”, señaló.

“Transformar esto en naturalizar la filtración ilegal como un elemento que condiciona el debate político antes de conocer la decisión del fiscal es una de las cosas que creo que también daña el sistema institucional”.