jueves, junio 27, 2024

El Banco Central dio a conocer este miércoles el Informe de Política Monetaria (IPoM) de junio de 2024, el cual destaca que la economía local ha evolucionado en línea con lo proyectado en el informe de marzo y que la actividad ha ido retomando una senda de crecimiento coherente con su tendencia, con un desempeño de la demanda algo mejor que lo esperado. Además, proyecta un incremento de la inflación durante 2025, incidida por el aumento de las tarifas eléctricas que se espera que se noten a partir de julio próximo.

De acuerdo al informe, el IPoM resalta que, “tal como se había anticipado en marzo y como fue confirmado por los datos de los Imacec de marzo y abril, parte del mayor crecimiento de inicios de año provino de factores de oferta que han ido revirtiéndose”.

En tanto, destaca que la variación anual de la inflación se ubica en torno a 3,5% —serie referencial empalmada— y que las expectativas a dos años se mantienen en 3%.

El IPoM resalta que una de las noticias importantes de los últimos meses ha sido el alza del precio del cobre, que “responde a factores transitorios y otros persistentes. El escenario de proyección considera un precio del metal más elevado que el estimado en marzo. Así, se utiliza como supuesto que el precio del cobre promediará US$4,3 la libra entre 2024 y 2026 (US$3,85 en marzo). Esto impactaría positivamente en la inversión, las expectativas de los agentes y el saldo de la cuenta corriente”.

Asimismo, el informe del instituto emisor destaca que la menor profundidad del mercado de capitales nacional, producto de los retiros de ahorros previsionales materializados, sigue afectando la economía, principalmente por su impacto en la disponibilidad de financiamiento local de más largo plazo.

Proyecciones

En cuanto a las proyecciones, el IPoM destaca que el “escenario macroeconómico ha evolucionado según lo previsto, aunque con una demanda interna que creció algo más que lo esperado en el primer trimestre. Asimismo, la economía local ha ido retomando gradualmente una senda de crecimiento coherente con su tendencia y la inflación ha seguido disminuyendo, con expectativas de inflación a dos años que siguen en 3%”.

Las novedades del escenario central de proyección respecto de marzo son el mejor punto de partida de la demanda interna, que será apoyado por el mayor precio del cobre y el reajuste de las tarifas eléctricas, que impacta fuertemente la inflación a un año plazo”, menciona.

Las proyecciones del informe esperan que la inflación local tenga un incremento importante durante 2025 y que su convergencia a la meta de 3% se produzca en 2026. En ello incide principalmente el impacto del shock de oferta asociado a la Ley de Estabilización de las Tarifas Eléctricas. El escenario central de proyección muestra que este fenómeno aumentaría en 1,45 puntos porcentuales la inflación proyectada a junio de 2025.

Considerados todos los cambios del escenario de proyección, el IPoM estima que la inflación anual cerraría 2024 en 4,2% (3,8% en marzo) y en 2025 en 3,6% (3,0% en marzo), con una inflación promedio que sería 1,1 puntos porcentuales mayor durante ese año.

A nivel de actividad, el informe que prevé que la actividad crecería entre 2,25 y 3% este año (entre 2 y 3% se proyectó en marzo). Se debe recordar que en la medida que avanza el año, el ancho del rango de proyección de crecimiento se va reduciendo en 25 puntos base. Señala el IPoM que el ajuste de la proyección para 2024 se relaciona con mejores datos efectivos por el lado del gasto y los alcances iniciales del alza del precio del cobre. A mediano plazo, los efectos de este último elemento se compensan con el impacto negativo que tienen los reajustes de las tarifas de electricidad en el ingreso disponible de los hogares. Ello incide en la mantención del rango de crecimiento entre 1,5 y 2,5% para 2025 y 2026.