El Instituto Nacional de Estadísticas de Chile (INE) dio a conocer este martes la Encuesta Nacional de Empleo (ENE), la cual mostró que la tasa de desocupación en Chile durante el trimestre enero-marzo se ubicó en 8,7%.
De acuerdo al INE, la cifra significó un descenso de 0,1 puntos porcentuales (pp.) en doce meses, debido a que el alza de la fuerza de trabajo (3,2%) fue menor a la presentada por las personas ocupadas (3,4%). Por su parte, las personas desocupadas aumentaron 1,7%, incididas por quienes buscan trabajo por primera vez (13,0%) y quienes se encontraban cesantes (0,5%).
Respecto al mismo periodo del año anterior, las tasas de participación y de ocupación se situaron en 62,4% y 57,0%, creciendo 1,4 pp. y 1,3 pp., respectivamente. Por otra parte, la población fuera de la fuerza de trabajo disminuyó 2,7%, influida únicamente por personas inactivas habituales (-4,9%).
En las mujeres, la tasa de desocupación se situó en 9,5%, sin presentar variación en doce meses; debido a aumentos en proporción similar tanto en la fuerza de trabajo (4,2%) como en las mujeres ocupadas (4,1%), en tanto el nivel de las desocupadas se expandió un 4,9%. Las tasas de participación y ocupación se situaron en 52,8% y 47,8%, incrementándose 1,7 pp. y 1,5 pp., respectivamente. Por su parte, las mujeres fuera de la fuerza de trabajo descendieron 2,5%.
En los hombres, la tasa de desocupación fue de 8,0%, con una disminución de 0,3 pp. en doce meses, a raíz del incremento de 2,5% de la fuerza de trabajo, menor al 2,8% registrado por los hombres ocupados; mientras los desocupados descendieron 1,1%. La tasa de participación, en tanto, llegó a 72,4% y la tasa de ocupación se situó en 66,6%, con variaciones respectivas de 1,0 pp. y 1,2 pp. Los hombres fuera de la fuerza de trabajo se redujeron 2,9%.
Alza de personas ocupadas
En doce meses, las personas ocupadas experimentaron un alza de 3,4%, incidida tanto por las mujeres (4,1%) como por los hombres (2,8%).
Los sectores que contribuyeron al aumento de la población ocupada fueron comercio (5,1%), administración pública (6,8%) y hogares como empleadores (12,5%); mientras todas las categorías ocupacionales presentaron incrementos, liderados por personas asalariadas formales (3,4%), asalariadas informales (6,3%) y trabajadores por cuenta propia (1,1%).
Informalidad
La tasa de ocupación informal se ubicó en 28,1%, con un alza de 0,7 pp. en un año. Las personas ocupadas informales aumentaron 5,8%, incididas tanto por mujeres (7,8%) como por los hombres (4,1%); y según sector económico, debido principalmente a comercio (13,3%) y hogares como empleadores (22,5%).
Estacionalidad
La tasa de desocupación ajustada estacionalmente (que elimina los efectos de los factores exógenos estacionales de naturaleza no económica que influyen en su comportamiento coyuntural) se situó en 8,5%, disminuyendo 0,1 pp. respecto al trimestre móvil anterior.
Horas de trabajo e indicadores de subutilización de la fuerza de trabajo
En doce meses, el volumen de trabajo, medido a través del número total de horas efectivas trabajadas por las personas ocupadas, ascendió 2,7%; mientras el promedio de horas trabajadas decreció 0,9%, llegando a 36,3 horas. Según sexo, el promedio de horas para los hombres fue 39,2 y para las mujeres, 32,5 horas.
La tasa combinada de desocupación y fuerza de trabajo potencial alcanzó 17,0%, con un incremento de 0,3 pp. en el período. En los hombres se situó en 14,3% y en las mujeres, en 20,4%. La brecha de género fue 6,1 pp.
Metropolitana
En la Región Metropolitana la tasa de desocupación del trimestre enero – marzo 2024, alcanzó un 9,6%, con un descenso de 0,5 pp. en doce meses. En el mismo período, la estimación del total de la población ocupada creció 2,3%. Según sector económico, comercio (6,0%), hogares como empleadores (14,5%) y enseñanza (4,9%) registraron las principales incidencias positivas.