El líder opositor -uno más de los tantos- y expresidente encargado venezolano, Juan Guaidó, reapareció para aprovechar la coyuntura emplazando al Presidente Gabriel Boric, luego del secuestro y homicidio del exmilitar Ronald Ojeda, llamando al mandatario chileno a no relativizar una dictadura como la de Nicolás Maduro y llegar a acuerdos policiales, pidiendo terminar con el convenio.
En un posteo en la red social “X”, Guaidó dijo que “no hay lugar para la relativización, son una brutal dictadura, pero no es todo, la delincuencia organizada y el terrorismo tienen base de operaciones en Venezuela, son auspiciados, bienvenidos por Maduro y una cúpula militar que maneja las mafias”.
“Entonces hay que señalar que la persecución que ejecuta Maduro mediante el Estado y también el paraestado que terceriza la persecución a través de bandas criminales y cuerpos irregulares los llamaron colectivos en su momento, pero también son los promotores atención de las zonas de paz, básicamente zonas de distensión que entregaron territorio a delincuentes, que dieron origen a bandas como el Tren de Aragua”, planteó.
El expresidente encargado señaló que “la madre de todas las penurias en Venezuela es la ausencia de Estado de derecho que hoy afecta a todo el continente entero. Es inaceptable normalizar o relativizar una dictadura con cosas como un acuerdo policial con el régimen de Maduro, tal como lo hizo el subsecretario del Interior de Chile, Manuel Monsalve, el 18 de enero, acuerdo sobre el cual la administración del Presidente Boric debe, por lo menos, explicar si compartió o no información con la dictadura”.
“Tiene implicaciones claro, para información como, por ejemplo, ubicación de refugiados. Serían nefastas las consecuencias. Insisto, normalizar una dictadura que está siendo investigada por cometer crímenes de lesa humanidad, que instrumenta el Estado para reprimir, que fue calificada el 8 de marzo de 2015 como amenaza inusual y extraordinaria por Estados Unidos. Su jerarca tiene puesto una recompensa por captura. Y fue señalado como proveedor de armas de fuego para grupos como las FARC y el ELN”, mencionó.
Además, Guaidó sostuvo que “el perfil criminal del autoritarismo venezolano claramente tipificado como narcoestado, no puede ser aliado de una democracia respetuosa de la ley y menos permitiendo o auspiciando mecanismos de persecución y secuestro de la disidencia”.
“En conclusión, Presidente Boric e instituciones chilenas, les pido como un ciudadano que también ha sido perseguido por una dictadura como miles de venezolanos, sean garantes de que haya justicia, y de verificarse la vinculación directa de Maduro en el asesinato, terrible, cobarde del teniente Ojeda, que no sólo haya justicia sino una respuesta proporcional a lo que sucedió, y por supuesto, la atención clara de lo que pasa en la región, y las implicaciones para su estabilidad y democracia”, remató.
El asesinato del Teniente Ojeda merece justicia y debe ayudarnos a poner en perspectiva que la crisis de Venezuela tiene consecuencias continentales.
El gobierno del presidente Boric @GabrielBoric no puede relativizar a una dictadura llegando a acuerdos policiales con Maduro. pic.twitter.com/7YLmsPgilq
— Juan Guaidó (@jguaido) March 5, 2024