El canciller, Alberto van Klaveren, dio por superado el impasse con el embajador argentino en Chile, Jorge Faurie, luego de la serie de polémicas declaraciones que hizo durante una relación bilateral en una reunión en Uspallata, en Mendoza, y luego en el Cristo Redentor.
El diplomático entregó frases para el bronce en esa ocasión como que “mi país ya era potencia agrícola cuando ustedes, los chilenos, recién aprendían a comer” o “el gobierno de Milei no reconoce tal cargo, el de delegado presidencial, no tiene importancia”.
En conversación con radio Cooperativa, Van Klaveren señaló que “no fueron palabras muy afortunadas, de eso yo creo que tiene conciencia el propio embajador Faurie, pero la verdad es que él dio explicaciones del caso y lo más importante, presentó disculpas públicas”.
“Yo creo que efectivamente un episodio lamentable, pero la verdad es que la relación con Argentina va mucho más allá de este tipo de episodio. Ha habido en tiempos anteriores también algunos desencuentros menores, pero yo creo que ninguno de esos desencuentros daña lo que es una relación que para nosotros es absolutamente fundamental y también para Argentina”, precisó.
El jefe de la diplomacia chilena sostuvo que “la semana pasada, día 17, 18, hubo dos reuniones en Buenos Aires en las que participó nuestro director de Fronteras y Límites, nuestro secretario general de Política Exterior, con sus contrapartes argentinas, y justamente estuvieron evaluando todo el tema de la facilitación de los pasos fronterizos, que es un tema que interesa mucho a a la ciudadanía. Pensemos en lo que viene ahora, la Semana Santa, el tráfico entre los dos países, al final, más allá de estos chascarros o exabruptos, lo que importa es justamente nuestra relación bilateral”.