El secuestro del venezolano Ronald Ojeda ocurrido el miércoles 21 de febrero pasado ha desatado un tsunami de especulaciones, alocadas e intrincadas opiniones de supuestos expertos en inteligencia y seguridad nacional y una prensa muy poco seria que se compra versiones de prensa extranjera de dudosa veracidad y coronado por un gobierno errático sin un relato políticocomunicacional adecuado para el caso. En definitiva el secuestro de este venezolano solo aumenta la percepción de inseguridad y de inoperancia de las policías y de paso -sospechosamente- instala una cuota de compadecimiento con los venezolanos inmigrantes en Chile en momentos en que se aumentan los casos de brutales crímenes perpetrados por venezolanos.
Pero lo peor de todo es que los medios nacionales, los políticos y supuestos expertos en inteligencia -incluidos ex oficiales generales chilenos- ‘vomitan’ toda clase de opiniones que rayan en la irresponsabilidad y, peor aún, se compran hipótesis como las de un supuesto diario ‘independiente venezolano’ y de un supuesto jefe de inteligencia de la oposición venezolana que vive en Miami (EEUU), mientras otros dicen que fue la CIA de EEUU y ahora seguramente saldrá otro diciendo que es la KGB de la exURSS o la Stasi o el MI6, en fin este caso, que por cierto es delicado, se está transformando en un caso de «Guerra Fría» y también en un circo que solo daña a la nación y lo deja -ante la opinión pública regional- como un país megavulnerable y sin inteligencia, por lo tanto presa fácil de crimen organizado e incluso un territorio de fácil conquista por parte de un país que le interese anexar territorios, por eso es irresponsable la actitud de la prensa en genera de los políticos y del propio gobierno que no sabe manejar crisis de esta gravedad.
De hecho, ayer el general de Ejército (R) Guillermo Paiva: “El secuestro del teniente (R) Ojeda fue realizado por una unidad especializada con altos grados de preparación. En Chile no hay un sistema de Inteligencia que funcione de manera conjunta» sostuvo el que fuera jefe de la Inteligencia del Ejército.
En esta misma línea el que también fuera general de Ejército y hoy jefe de Estudios de Seguridad y Defensa Nacional de AthenaLab (de propiedad del empresario Nicolás Ibáñez), John Griffiths, afirmó que «no hay país democrático en el cual no actúen servicios de inteligencia extranjeros».
Un poco más prudente ha sido el exsubsecretario de Defensa, Gabriel Gaspar -que ha sido muy critico con el gobierno una vez que salió del puesto- dijo: «no hay pruebas de que se trate de una operación extranjera, salvo lo que afirma la fuente citada, el señor (Iván) Simonovis desde Miami. Inclusive, ha llegado a afirmar el mismo día del secuestro, que el plagiado ya estaría en Venezuela, sin agregar ningún elemento probatorio».
Pero reviviendo la Guerra Fría es el ex ministro vocero de Piñera, Jaime Bellolio quien culpa a los ‘comeguaguas’: «El Partido Comunista tiene un rol acá. Y la pregunta es ¿qué sabía el Partido Comunista? ¿Cómo le llegó esos datos a alguien? ¿Qué rol tiene el subsecretario de Defensa? ¿Qué rol tiene Juan Andrés Lagos, que es asesor del gabinete del subsecretario de Interior?»
Por supuesto no podía falta la ‘opinión experta’ del ‘camaleón’ político Pepe Auth (ExPPd) y hoy podría pasar hasta por republicano por sus ácidas críticas al gobierno de turno, sostiene: «me llama la atención la desnudez con que se puede desarrollar una operación de esta envergadura en Chile sin que nadie sepa nada, porque claramente las autoridades no atinan, o sea no sabemos ni saben todavía de qué se trata».
Así las cosas ahora habría que esperar que a Ojeda lo santifiquen o hagan una ‘teletón’ para encontrarlo, por mientras en Caracas seguramente están celebrando esta comedia de errores que dejan a Chile como dijo una vez Alan García -el corrupto Pdte. peruano que se suicidó- una ‘republiqueta‘.