La Ley 21.172, más conocida como “Ley Chao Cables”, fue promulgada hace cuatro años, aunque en la práctica los residuos aéreos siguen aumentando. ¿Basta con la legislación?
El retiro frecuente de toneladas de basura depositada en contenedores es una preocupación creciente para distintos municipios del país, pero no la única. Durante este año los denominados “escombros aéreos” generan alarma, ya que además de la contaminación visual que produce el excesivo cable en desuso, es un potencial foco de accidentes.
La Ley 21.172, conocida como “Chao Cables”, tiene el fin de normar su retiro, responsabilizando a los prestadores de servicio, como son empresas de electricidad o telecomunicaciones, aunque desde su promulgación en agosto de 2019 pocos municipios han podido ejercerla por diversas situaciones, como falta de recursos para fiscalizar.
Víctor Opazo Carvallo, Gerente General de Netline, explica que “las leyes ayudan a mitigar ciertos fenómenos, pero por si solas no siempre son suficientes. Para eliminar los cables debe haber un incentivo a nivel de clientes, para que opten por un servicio inalámbrico, y ese es un desafío a nivel de industria”.
“Afortunadamente, para empresas, ya es posible hacer frente a este problema modificando el tipo de conexión a Internet que contratan, y optando, por ejemplo, por un enlace Dedicado Inalámbrico que garantiza los máximos niveles de disponibilidad, sin cortes, y con velocidades que pueden alcanzar incluso los 10Gbps”, explica el ejecutivo.
Con este tipo de conexión, que opera vía microondas, a nivel corporativo es posible diversificar el riesgo de tener pérdidas de productividad ante situaciones muy frecuentes, como el robo de cables, o cualquier otro imprevisto relacionado con un sobrepeso en el tendido público, como puede ser el colapso y caída de un poste.
“Netline cuenta con NetAir, una solución para empresas cuyo servicio de instalación es dentro de 24 horas y con la mayor tasa de Uptime del país, pudiendo ser implementado como punto de conexión principal, como backup e incluso como un seguro, que se activa únicamente cuando se sufre un imprevisto”, agrega Víctor Opazo Carvallo.
La Ley “Chao Cables” puede ser un útil aliado para reducir la existencia de escombros aéreos, en la medida que sea posible ponerla en práctica. Mientras, al menos a nivel de empresas ya existen formas eficaces de prescindir del cable, sin perder productividad ni velocidad.