La consejera republicana y presidenta del Consejo Constitucional, Beatriz Hevia, dijo este martes que esperaba que el nuevo texto de Carta Magna, entregado al Presidente Gabriel Boric,sea aprobado el 17 de diciembre próximo para así cerrar un “proceso de discusión y confrontación de ideas”.

Asimismo, en su discurso en el cierre del segundo proceso constitucional, la consejera de extrema derecha señaló que “quiero ser brutalmente honesta: cuando el 4 de julio del año pasado, en este mismo salón, la Presidenta de la Convención anterior (María Elisa Quinteros) le hizo entrega de la propuesta constitucional, ni usted, Presidente, ni yo, en ese entonces una simple asesora legislativa, podríamos haber imaginado que estaríamos en este mismo lugar, asistiendo a una nueva ceremonia de entrega”.

En ese sentido, precisó que apuntó a que el trabajo que se realizó en el órgano que ella encabezó hasta hoy buscaba “ponerle fin a este proceso de discusión, confrontación de ideas y elaboración de la propuesta de Carta Fundamental”.

Luego apuntó al Presidente Gabriel Boric, indicando que “usted, estimado Presidente, porque seguramente albergaba la esperanza de que ganara el apruebo y comenzara a regir un nuevo texto constitucional. En mi caso, por una razón totalmente distinta, porque tenía la convicción de que ganaría el Rechazo y la confianza de que se respetaría el cierre de la cuestión constitucional”.

“Pero nada de ello ocurrió, y hoy estamos aquí, para una nueva cita con la historia y para hacernos cargo, cada uno desde su posición, de nuestras responsabilidades”, sostuvo.

En esa línea, Hevia afirmó que “más allá de cualquier diferencia política, es urgente entender (…) que los verdaderos chilenos, los chilenos honrados y pacíficos, los de trabajo, anhelan con esperanza, quizás sin saberlo, que se cierre este proceso constitucional”.

Finalmente, la expresidenta del Consejo Constitucional mencionó que “los habitantes de nuestro país tienen la aspiración de que la política y los políticos dejemos de lado nuestras diferencias ideológicas y programáticas, y nos pongamos en el lugar de cada uno de los chilenos y de la necesidad urgente que tienen de poner fin a la incertidumbre política, económica y social, y comencemos a reconstruir nuestro país, rescatándolo de la grave crisis que enfrentamos”.