El jefe de Inteligencia Militar de las FDI, Gral. Aharon Haliva, declaró el martes que el fracaso en frustrar el ataque de Hamas contra Israel tuvo su comienzo en una falla de inteligencia: «La inteligencia militar bajo mi mando no advirtió sobre el ataque terrorista llevado a cabo por Hamás», escribió Haliva en una carta y que reseña la agencia AJN.
«Fracasamos en nuestra misión más importante y, como jefe de la Inteligencia Militar, asumo toda la responsabilidad por el fracaso. Lo que sea necesario investigar, lo investigaremos de la manera más profunda y conmovedora y sacaremos conclusiones. Pero ahora, ante nuestros ojos, solo hay una misión: ¡contraatacar y ganar!», escribió Haliva,.
Ayer, el jefe de la agencia de seguridad e inteligencia interior israelí, Shin Bet, también afirmó que es personalmente responsable de la falta de una alerta temprana.
En una misiva dirigida a los miembros de la agencia, Ronen Bar escribió: “A pesar de una serie de acciones que llevamos a cabo, lamentablemente el sábado no pudimos generar una advertencia suficiente que permitiera frustrar el ataque”.
“Como quien dirige la organización, la responsabilidad de esto es mía”, expresó Bar. “Habrá tiempo para las investigaciones. Ahora estamos luchando”.
Varias horas antes del ataque del 7 de octubre, el aparato de defensa identificó un movimiento inusual en la Franja de Gaza, lo que dio lugar a una llamada telefónica a altas horas de la noche entre funcionarios, pero las señales fueron en gran medida ignoradas.
Aun así, según informes de los medios de comunicación en hebreo, Bar fue a la sede de la agencia y ordenó el despliegue de un pequeño equipo en la frontera de Gaza, anticipando un ataque a pequeña escala.
Al menos 10 miembros del Shin Bet murieron durante los ataques del 7 de octubre, según la agencia.
“Estamos en una guerra, no en una ronda (de combates). Una ronda se gana con imagen de victoria y silencio; una guerra termina con una victoria decisiva y un cambio de situación. No hay límite de fronteras, ni límite de tiempo. Hasta el final”, añadió Bar.
Más de 1.400 israelíes y extranjeros fueron asesinados hasta el martes por la mañana y más de 4.229 resultaron heridos, según el Ministerio de Salud.
Las FDI se han contactado con 199 familias de cautivos en Gaza.
