· Según expertos, realizar inspecciones es fundamental para evitar malos ratos posterior a la entrega de una propiedad, tanto si se es arrendatario como comprador.
En promedio, alrededor de los 100% de los departamentos presenta alguna falla en las terminaciones, según indican desde Crece Inmobiliario, empresa encargada de asesorar inversionistas inmobiliarios y que cuenta con presencia en el mercado nacional e internacional. Razón por la cual, destacan la importancia de que las personas puedan estar atento a estos detalles mediante inspecciones, antes de la entrega de la propiedad y, también, si se busca arrendar una propiedad.
“En el caso de las propiedades nuevas, al momento de adquirir una, generalmente se lleva a cabo una inspección a cargo de empresas especializadas, que resulta en un promedio de 50 observaciones. Sorprendentemente, según las estadísticas, el 100% de los departamentos inspeccionados muestran defectos en las terminaciones. Asimismo, un 95% presenta problemas relacionados con aspectos sanitarios, como agua y filtraciones. Se observa que el 80% de las propiedades presentan fallas en el tema de humedad, mientras que un 60% presenta fallas eléctricas. Además, un 10% tiene una menor superficie de la prometida y un 10% presenta fugas de gas”, comenta Cristián Martínez, fundador de Crece Inmobiliario.
El especialista indica que es fundamental asegurarse de que la propiedad esté en buen estado al recibirla, dado que las inmobiliarias tardan en promedio tres meses en solucionar problemas una vez que ya se está habitando la propiedad, lo que puede generar complicaciones en cuanto al retorno de la inversión. “Los inquilinos insatisfechos pueden ocasionar costos adicionales, ya sea mediante descuentos en el alquiler o incluso desocupando el departamento temporalmente para realizar las reparaciones necesarias. Esto implica una pérdida significativa de tiempo y dinero, ya que se deben coordinar múltiples gestiones con la inmobiliaria y el arrendatario”, afirma Cristián Martínez.
Inspeccionar también si se es arrendatario
En línea con lo anterior, el experto indica que este tipo de procedimientos es importante también para quienes son arrendatarios, para que puedan evitar malos entendidos posteriores.
“Mediante esta inspección, se revisa minuciosamente el estado general de la propiedad, lo que agiliza y optimiza el proceso de devolución de garantías. Asimismo, se evita gastar en reparaciones innecesarias, ya que se asegura que la propiedad se encuentre en buen estado desde el momento de su recepción. Este chequeo es obligatorio tanto para el inversionista como para el arrendatario, y garantiza una mayor transparencia para ambas partes involucradas”, comenta Cristián Martínez.
El especialista agrega que “hacer esto es más barato y demora menos tiempo, porque no hay que coordinar con arrendatarios y, cuando se compra, la post venta de las inmobiliarias está ahí mismo. Si bien es un gasto al momento de recibir la propiedad, hay que verlo como una inversión donde se ahorra tiempo y malos ratos. En Crece Inmobiliario trabajamos con empresas que se encargan de hacer estas inspecciones con los proyectos que vamos trabajando, acompañando a los inversionistas también en este proceso”.