Este miércoles, través de su cuenta de Twitter el Presidente de El Salvador,  Nayib Bukele que ha sido cuestionado internacionalmente por su total desapego a normas internacionales sobre el tratamiento a los presos, respondió duramente al Presidente de Chile, Gabriel Boric tras haber hecho una mención en entrevista a BBC Mundo sobre el combate a la delincuencia y el pequeño país centroamericano: «Consultado sobre la estrategia en Seguridad del presidente de El Salvador, Nayib Bukele, @GabrielBoric dice que, si la solución solo se enfoca en «las medidas más extremas» y no en los «temas de fondo», es «pan para hoy y hambre para mañana», reseñó el medio británico.

La mención no le cayó bien a Bukele que disparó: «Pues este gobierno puede hacer dos cosas a la vez. Una buena estrategia de seguridad incluye la prevención y la represión directa del delito. Qué difícil ha de ser liderar un país, teniendo tan poco sentido común. Gracias a Dios los chilenos son más que su presidente», posteó el mandatario salvadoreño que irónicamente invoca a Dios, como si Dios estuviera interesado en la política.

Recordemos que Bukele instauró un «régimen de excepción» que ha sido implacable con la delincuencia y también con sus opositores rayando en una dictadura, al 4 de mayo pasado, superan los 68.000 los detenidos según la información oficial entregada por el Ministerio de Seguridad y el mandatario va a la reelección presidencial que ha sido cuestionado porque habría cierta vulneración a la Constitución de su país.

La pregunta completa que le hizo BBC al Presidente Boric y su respuesta claramente tiene mucho sentido común algo qe le faltó a la rabiosa respuesta del salvadoreño:

¿Cómo ve la estrategia de Nayib Bukele en su lucha contra las pandillas en El Salvador y la enorme popularidad que esto le ha traído?, preguntó BBC.

«Creo que si para conseguir un objetivo loable, que es el deseo de seguridad que tienen las grandes mayorías de la población en cualquier país del mundo, se toman atajos en términos de las convicciones democráticas y de respeto de los derechos humanos, finalmente eso tarde o temprano termina pagando la cuenta”.

“Cuando solo se enfoca desde la cuña de quién es el más duro o categórico, o las medidas más extremas para combatir la delincuencia, al final no estamos solucionando el tema de fondo y es pan para hoy y hambre para mañana”, reflexionó el Mandatario Chileno.