La ministra del Interior, Carolina Tohá, se refirió este lunes a los dichos de la presidenta de su partido, el PPD, Natalia Piergentili, tras los cuestionamientos a la falta de autocrítica del Gobierno tras la derrota del 7 de mayo, afirmando que esta es una situación “incómoda” y “enojosa”.
En declaraciones a Tele 13 Radio, la jefa de gabinete dijo que “hay cosas ingratas en estos cargos y hay esto. Es una situación claramente incómoda, enojosa, pero uno no está para hablar de sus situaciones personales, sino que para lo que está es para sacar adelante a un Gobierno que está concentrado precisamente en las cosas que se mencionaban en la entrevista y que situaciones como ésta de alguna manera alejan o llevan la atención pública y la atención de las fuerzas de Gobierno a polémicas que hoy no contribuyen a lo más mínimo”.
“Si uno quiere, como se dijo en esa entrevista, concentrarse en los cambios que le quieren cambiar la vida de las personas, si uno quiere ocupar la situación de estar como fuerza de Gobierno para llevar adelante transformaciones, políticas públicas, proyectos de inversión que toquen a esos sectores importantes que a lo mejor no han votado por nosotros las últimas veces, lo que menos debe hacer son polémicas internas al interior de las fuerzas de Gobierno, eso es alejarse totalmente de los sectores populares y los intereses de los grupos medios”, afirmó.
Respecto a que si Piergentili debía renunciar a la presidencia de la colectividad, Tohá sostuvo que “creo sinceramente conociendo al Partido por la Democracia que esa no es una postura mayoritaria en el PPD, creo que eso probablemente se va a expresar en los distintos sectores. Y creo que la misma presidenta del PPD ayer con sus disculpas, buscó también decir que la manera que se expresó no es lo que buscaba cuando hizo esa entrevista”.
Sobre los cuestionamientos a la agenda identitaria y disidencias sexuales, la secretaria de Estado precisó que “es particularmente injusto, cruel, que se ponga como un obstáculo a lograr propuestas para las mayorías, el hecho de que se pone atención a la discriminación que sufren los grupos como las disidencias sexuales (…) el problema no son los temas identitarios, el tema es que uno tiene que hablarle a las mayorías”.
“No sé en que momento se puede decir que es un Gobierno que está preocupado de minorías, creo que se está discutiendo con el fantasma de cosas que pasaron años atrás (…) Creo que poner el acento en ese punto no habla de la realidad que tenemos hoy que ha costado un gran esfuerzo construirla, en que todo el mundo ha ido haciendo autocríticas, enmiendas”, afirmó.