La derecha está con los pelos tomados en contra del ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, por la “obsesión” que tiene en el Mineduc por la educación sexual integral por los ejercicios para los niños de kínder, por lo que anunciaron desde una interepelación como la posibilidad de una acusación constitucional.

De acuerdo a los parlamentarios de oposición, Ávila pretende imponer su propia orientación sexual en el currículum educativo, afirmando que buscarán las firmas para interponer una acusación constitucional en su contra.

Uno de los críticos al plan del Mineduc, el diputado UDI, Sergio Bobadilla, dijo que es entendible la orientación sexual del ministro, pero “lo que no entendemos es que su inclinación la ponga como prioridad en los temas educacionales en nuestro país”.

“Creemos que ante la violencia que ha capturado distintos establecimientos el ministro no ha utilizado las herramientas que el Estado de Derecho le entrega como por ejemplo, aula segura (…) Además, la prioridad del ministro no está en recuperar los 50 mil alumnos que han desertado”, explicó.

A su vez, la diputada RN, Camila Flores, señala que “hay muchísimos temas que sin duda son mas graves y urgentes que atender y este ministro sigue orientado en cosas que le preocupan solo a él y a determinados grupos de interés. Este ministro por decencia debería dejar su cargo, mientras tanto, avanzaremos en esta interpelación y sin duda, probablemente, van a existir antecedentes suficientes para avanzar en una Acusación Constitucional”.

En tanto, la diputada Francesca Muñoz, del Partido Social Cristiano, dijo que “vamos a presentar una acusación constitucional contra el ministro de Educación, Marco Ávila, por haber infringido lo que es nuestra Constitución. Específicamente, el derecho preferente de los padres a educar a sus hijos”.

“Se han estado creando instrumentos, donde tiene fuerte carga ideológica, dejando fuera a los padres que no comparten estas ideologías. Se está confundiendo la identidad sexual de los niños”, sostuvo.

A su vez, el parlamentario del Partido Republicano, Stephan Schubert, mencionó que “tenemos una crisis de seguridad en los colegios, de calidad, de deserción, de inasistencia, de uso irresponsable de drogas y alcohol. tenemos serios problemas y el ministro sigue con su agenda ideológica hipersexualizando niños a temprana edad”.

Por su parte, el diputado UDI, Gustavo Benavente, precisó que “están todas las bancadas de oposición presentes. Por tanto, creemos que tenemos las firmas suficientes para presentar una interpelación”.

“Tenemos que tomar en cuenta no solo los 50 mil niños que tienen deserción escolar, hay 300 mil niños con problemas de matrícula, que si bien no han desertado, están asistiendo a clases de manera intermitente. Y también de eso va a tener que dar cuenta el ministro, y tendrán que ser explicaciones satisfactorias sobre qué está haciendo el Ministerio de Educación”, afirmó.