La política chilena cada vez está más en lo profundo de la ciénaga, con políticos, partidos y Congreso con altas tasas de desaprobación y siguen apareciendo casos que profundizan más esa herida. Ahora le tocó el turno a la diputada del FA, Maite Orsini, cuyo tema provocó una polémica al estilo Corín Tellado, ya que su supuesta relación con el exfutbolista, Jorge “Mago” Valdivia, salpicó a la clase más desprestigiada del país, causando dimes y diretes entre el oficialismo y la oposición.

Ante este nuevo problema, esta vez de “faldas”, el Gobierno decidió no profundizar en el tema y la ministra de la Segpres, Ana Lya Uriarte, descartó que sea un problema para el Ejecutivo, indicando que “nosotros tenemos un tremendo aprecio por todos los parlamentarios y parlamentarias. Representan a las personas que votaron por ellos, por lo tanto, todos tienen un origen profundamente democrático, por lo cual merecen todo nuestro respeto”, aseguró.

“En relación a la situación particular que usted me plantea, nosotros le dejamos a la justicia la definición, que la propia diputada decidió que así fuera”, mencionó la secretaria de Estado respecto a una eventual llamada que hizo Orsini a una general de Carabineros, Karina Soza, para interceder a favor del exjugador de Colo Colo.

La diputada desmintió las acusaciones yse autodenunció ante la fiscalía para que se demuestre que esto no ocurrió, al mismo tiempo que anunció acciones legales por estas acusaciones.

Oposición va al Comité de Ética

A su vez, la oposición se tomó de esta nueva polémica para tirarse con todo en contra del oficialismo, especialmente de la diputada Orsini, ya que el diputado y presidente de la comisión de Seguridad, Jorge Alessandri (UDI), anunció que enviará a la parlamentaria a la Comisión de Ética por el telefonazo que habría efectuado a Carabineros.

“Cuando cualquier autoridad de la República llama a un funcionario del Estado para pedirle un trato especial, un beneficio especial para sí o terceros comete una irregularidad”, explicó.

Alessandri aprovechó de la autodenuncia hecha por la misma diputada Orsini para plantear que con este hecho “reconoce haber llamado a una alta oficial de Carabineros de Chile”.

El parlamentario gremialista dijo que la investigación que se debe hacer es si esa llamada cambió los procedimientos o permitió interceder a favor de una tercera persona y si “hubo presión o no de parte de esa parlamentaria”.