La bancada PPD-Independientes lamentó que la Cámara rechazara la idea de legislar la reforma tributaria, dejando en jaque el financiamiento del programa de gobierno del Presidente Gabriel Boric, afirmando que lo sucedido es que “hoy está de fiesta la elusión y la evasión”.
La iniciativa obtuvo 73 votos a favor, 71 en contra (principalmente de Chile Vamos) y tres abstenciones (Gaspar Rivas, Andrés Jouannet y Enrique Lee), no alcanzando así el quórum para avanzar en su tramitación.
El vicepresidente de la Cámara, el diputado independiente, Carlos Bianchi, señaló que «hoy está de fiesta la elusión y la evasión. Este rechazo obliga a que se insista en el Senado, obligando a que vuelva a haber una nueva negociación, un nuevo diálogo y buscar mayorías. Quiero confiar en la cordura, en la mesura, en que el Estado de Chile va a dar cumplimiento a las demandas sociales que involucra poder contar con nuevos recursos a través de una reforma tributaria«.
Por su parte, el diputado PPD y miembro de la comisión de Hacienda, Raúl Soto, manifestó que «lo que acaba de ocurrir es de una irresponsabilidad y de una mezquindad que pocas veces se ha visto en este Congreso Nacional. Rechazar la idea de legislar una reforma tributaria, que buscaba financiar mejores pensiones para los chilenos, mejor salud, educación, más viviendas, mejores recursos para las comunas de las regiones de nuestro país, sólo por causarle una derrota política al gobierno, me parece una irresponsabilidad. El daño no se le hace al gobierno, ni al presidente Boric, ni al ministro Marcel; el daño se lo están haciendo a Chile, y lamentablemente la consecuencia de ello es que va hacer muy difícil sacar adelante las reformas sociales que van en ayuda de los chilenos y chilenas que están esperando«.
En tanto, el jefe de la bancada PPD- Independientes, Cristián Tapia, sostuvo que «lo que me preocupa es que la mayoría que votó en contra, dice que este proyecto es muy malo, sin dejar espacio para una posible negociación. Yo creo que se votó desinformadamente, porque aquí se decía que se iban a meter en el bolsillo de la clase baja y media, sin embargo, dos tercios de este proyecto iba a hacer la recaudación de la evasión y elusión de los más ricos. Estoy muy decepcionado porque vengo de la clase trabajadora, del mundo sindical, vengo de representar a una gran cantidad de personas que están jubiladas con míseras pensiones, y definitivamente se empieza a pensar más en lo ideológico, que este gobierno fracase, y no en las personas«.
Asimismo, la diputada independiente-PPD, Marta González, manifestó que «esta reforma era un gran paso para avanzar en equidad y redistribución, pero para la derecha nunca ha sido tiempo para una reforma tributaria. Hoy la derecha ha mostrado su lado más miserable y más mezquino, junto con el partido republicano y otros grupos que no entienden que hay que avanzar en estas propuestas. Los que votaron en contra, también están votando en contra de las mujeres más pobres, de mejorar las pensiones, viviendas y salud de este país. Este país no aguanta el doble estándar, pero hoy día la derecha se ha encargado de poner a las pymes como un escudo protector, para seguir protegiendo a los grandes empresarios, para que sigan evadiendo impuestos«.
Finalmente, el diputado independiente-PPD, Jaime Araya, añadió que «la derecha está confundida entre ser oposición al Presidente Gabriel Boric y ser oposición al futuro de un país más justo. Llamaría al gobierno a asumir con pragmatismo que somos una minoría cada vez más pequeña, por eso tratemos de avanzar en aquello que combate la elusión y evasión tributaria, que eso genera un buen efecto de recaudación, es una cosa importante que se puede hacer, puede generar un amplio consenso, porque la gente más modesta de nuestro país, la clase media, no puede seguir esperando que este Parlamento se ponga de acuerdo en cosas esenciales, como que los que tienen más pagan más, y los que tienen menos pagan menos«.
