viernes, noviembre 22, 2024

Cómo debe ser el calzado ideal para la tercera edad en verano

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A medida que pasan los años y las personas envejecen, sus huesos y músculos se tienden a debilitar. Al suceder esto les dificulta mantener el equilibrio mientras caminan, además, suelen tener enfermedades como artritis y artrosis teniendo que mantener especial cuidado a la hora de escoger un zapato.

A la hora de escoger calzado, las personas de la tercera edad tienen un punto de dificultad extra, ya que tienden a sufrir cambios fisiológicos y enfermedades que afectan en su forma de caminar, teniendo que adquirir un zapato especial para su tipo de pies. Uno de los requisitos más importantes es la seguridad, para evitar caídas debido a distintas lesiones en los dedos y en la planta del pie.

En diversas ocasiones los adultos mayores tienden a escoger de forma errónea su calzado, y así lo deja entrever un estudio realizado por el Equipo de Investigación Multidisciplinar del Pie: Biomecánica, Patología, Ortopedia y Cirugía de la Universidad de Extremadura, donde se concluyó que el 83% de las personas mayores usaban un calzado inadecuado, produciendo disfunciones, heridas, etc.

Dentro de los cambios y dolencias más frecuentes se encuentra la inestabilidad, ya que las personas de tercera edad tienden a tener una reducción de la capacidad de movimiento, debido a alteraciones frecuentes como la artritis o la artrosis. Además, con la edad aparecen ciertas dolencias y patologías, como la disminución de la rigidez en los ligamentos y articulaciones. Por otro lado, también la gente que tiene diabetes sufre de una alteración en la sensibilidad del pie diabético, lo que altera la sensibilidad y aumenta la probabilidad de formación de heridas de difícil curación.

Es por estas razones que Mike’s compañía dedicada al diseño, desarrollo y comercialización de calzado, cuenta con zapatos especializados para adultos mayores con características diferenciadoras. “A las personas de la tercera edad les cuesta más abrochar sus zapatos por las dolencias que tienen y por la poca movilidad. Entonces nunca deberían usar un calzado con cordones normales, porque aparte de que muchos no ven, no se van a dar cuenta si está suelto hasta que se hayan caído, o tienden a sobrecompensar y atarse el calzado demasiado apretado para evitar que se suelte durante el día. Es por eso que desarrollamos calzados con velcros, además no tienen costuras, con contrafuertes reforzamos, con una suelas más gruesas, antideslizantes y plantillas que sirva tanto para pies cavos y/o planos”, explica Myriam Hernández, dueña de Mike’s.

Es de suma importancia que los adultos mayores se sientan cómodos y seguros a la hora de usar un calzado, que este no quede suelto o desabrochado y que sea de la talla correcta.

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