Debido al creciente envejecimiento de la población en Chile y el mundo, se estima que el Alzheimer será una de las pandemias que tendremos que enfrentar en unos años más y con un escenario poco prometedor: sin cura ni medicamentos para su tratamiento. A esto se suma que esta patología no recae solo en quienes la padecen, sino que también en sus cuidadores, quienes pueden llegar a sufrir trastornos anímicos o ansiosos.
“Efectivamente el Alzheimer es una enfermedad muy prevalente en la población, se considera una de las próximas pandemias. Hoy en día las enfermedades neurodegenerativas tienen una presentación y un costo social muy alto, sobre todo en las poblaciones que van cambiando una pirámide que cada día va envejeciendo más. Es una enfermedad que trae costos no solo al sistema de salud, sino que también costos sociales para toda la familia. Es una enfermedad que involucra al paciente y a su entorno”, afirma el doctor Ronald Soto, subjefe de Neurología y coordinador Neurología de Agudos del Hospital San Juan de Dios.
Esto llama a reflexionar sobre el alcance de este mal, al cual todos podemos estar expuestos en un momento. “Chile tiene una esperanza de vida muy alta, no hay que olvidar que en Chile la esperanza de vida de las mujeres está en 80 años. Esta enfermedad tiene una incidencia progresiva con el paso del tiempo, eso significa que los sistemas y la población que van envejeciendo tendrán una mayor cantidad de enfermedades neurodegenerativas”, agrega el especialista.
Para el doctor Soto, la preocupación pasa también por quienes están a cargo de estos pacientes con alto deterioro cognitivo, porque pueden sufrir el síndrome del cuidador. “Permite también a la familia entender cuál es la historia natural de esta enfermedad y anticiparse, saber que habrán eventos que van a ir cambiando en el tiempo, independiente de las intervenciones que uno realice, y para que ellos también puedan contener su nivel de incertidumbre y no estar tan ansiosos, porque cuidar pacientes con alteración de la funcionalidad puede llevar a un desgaste y enfermedades del cuidador”, que tienen relación con el desgaste físico, psicológico y de su salud en general.
Finalmente, un pedido especial hizo el especialista del HSJD, en el marco del Día Mundial del Alzheimer: favorecer la interacción e inclusión social de los adultos mayores, porque es una herramienta que permite prevenir el Alzheimer y otras enfermedades neurodegenerativas, al igual que llevar una vida sana, una dieta equilibrada y no dejar de hacer ejercicios.