La senadora PS, Isabel Allende, destacó este miércoles la aprobación del proyecto de matrimonio igualitario, ya que con esta iniciativa se da un paso importante en el reconocimiento, la dignidad y la tolerancia de personas que han estado marginadas.
“Hoy hemos dado un paso muy importe en el reconocimiento, en dignidad, en tolerancia y sobre todo en reparar una deuda que teníamos en nuestro país. El establecimiento del matrimonio para personas del mismo sexo es un derecho que el Estado chileno no reconocía, y que solo perpetúa una discriminación arbitraria, odiosa y sin fundamentos”, aseguró la legisladora opositora.
En esa línea, Allende dijo que “hoy es un día histórico, y no puedo dejar de agradecer y reconocer a las organizaciones como Fundación Iguales, el Movilh, Rompiendo el Silencio y tantas personas, muchas de ellas anónimas, que durante muchos años no han dejado de luchar y de mantener en la opinión pública y política un tema tan importante para hacer nuestra sociedad más libre e igualitaria”.
Añadió que también es un momento histórico, “porque reconocemos los derechos de las hijas e hijos de parejas del mismo sexo. Lo que hacemos hoy es centrar la mirada en las niñas y los niños, dándoles la opción y el reconocimiento legal a ser acogidos en un entorno por cierto de amor como ocurre hoy, pero con pleno respeto de sus derechos”.
La parlamentaria opositora también recordó que existen sentencias judiciales que reconocen a familias homoparentales y que han ordenado inscribir a hijos con dos padres o dos madres, puesto que “en un Chile que cambia, en un Chile que escribe una nueva carta fundamental, no podemos seguir teniendo una moral que margina y excluye”.
La senadora también expresó que “no queremos tener nunca más casos como el de Daniel Zamudio. No queremos nunca más que las parejas LGBTI+ sean tratadas como de segunda clase, al no garantizar sus derechos más elementales”.
Finalmente, Allende afirmó que actualmente vivimos en una sociedad laica y “no podíamos seguir sin legislar la posibilidad de contraer un vínculo contractual que otorgue todas las garantías a quienes, con afecto y amor, desde la libertad de su sexualidad han decido compartir sus vidas con parejas de su mismo género”.