Desde el anuncio de la franja deportiva en comunas en cuarentena, las personas han podido aumentar su actividad, un factor de suma relevancia considerando que el país lleva más de un año en distintas fases de confinamiento, que afectan directamente a la salud mental y física.
Pero, ¿cómo podemos dormir mejor para tener un buen rendimiento deportivo en la madrugada? Lo primero a considerar, entendiendo que la franja comienza a las 5 de la mañana, es saber que el cuerpo no va a rendir y se va a sentir cansado si una persona no duerme una cantidad de horas suficiente, por tanto “las personas que se van a levantar temprano a practicar deportes deben ordenar su rutina de sueño para asegurar un descanso adecuado. Por ejemplo, si una persona se quiere levantar a las 5am todos los días, debe acostarse a dormir al menos a las 10 u 11 de la noche anterior, para asegurar alrededor de 7 u 8 horas de sueño”, sostiene Álvaro Vidal, neurólogo de Clínica Somno.
Por otro lado, surge la inquietud de si alrededor de las 5 o 7 de la mañana es un buen momento o no para ejercitarse, y la verdad es que según el especialista sí lo es, porque “si bien, dependiendo de la zona del país en que la persona se encuentre, el frío del invierno puede ser un impedimento, las primeras horas del día antes de iniciar la jornada laboral es un perfecto momento para activar el cuerpo y la quema de calorías. En estos casos el ejercicio entrega más concentración y buen ánimo para el resto del día”.
Otra razón de peso para preocuparse y ocuparse de dormir bien antes de aprovechar la franja deportiva, es la accidentalidad. “Un ciclista o un trotador deben estar en todos sus sentidos para manejar la bicicleta o su propio cuerpo. Si duermen mal, aumentan las probabilidades de que se accidenten, tropiecen, choquen o no estén lo suficientemente alertas a los estímulos externos”, sostiene el especialista de Clínica Somno.
Por ello, para lograr dormir bien y tener un sueño reparador, Álvaro Vidal comenta que no existen fórmulas mágicas y que simplemente se trata de ordenar los hábitos diarios a conciencia, tanto de alimentación como de sueño, para que al llegar la noche el cuerpo naturalmente pida descansar. Para esto recomienda:
- Evitar las siestas y, en caso que se tomen, que duren máximo 30 minutos.
- Evitar comer cenas demasiado pesadas, picantes y/o calóricas.
- Disminuir el consumo de bebidas energizantes después de las 16:00 horas.
- Procurar ir a acostarse sin el teléfono en la mano para evitar la exposición prolongada a la luz azul de la pantalla, que a su vez disminuye la hormona que nos permite conciliar el sueño.
- Intentar acostumbrar al cuerpo a acostarse y levantarse todos los días a la misma hora, para educarlo en el nuevo horario.
- Idealmente no ver televisión al acostarse, de esta forma se podrá conciliar el sueño en menos tiempo.