La Dirección Meteorológica pronosticó que este 2021 habrá un déficit hídrico similar al de 2019, considerado como el año más seco y crítico de la historia reciente del país. Sin embargo, se aseguró que habrá agua potable disponible para lo que queda del año y para todo el territorio nacional.

El ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno, junto a la meteoróloga Catalina Cortés,  entregó el balance de precipitaciones en lo que va del año y lo que se prevé para este invierno, de las zonas norte, centro y centro-sur del país, las cuales estarán muy lejos del promedio histórico.

En ese sentido, el titular del MOP dijo que el 2019 ha sido el más seco de la historia, con déficits de precipitaciones cercanas al 80% en la zona central del país y peor sequía registrada, con disminuciones del orden del 40% en la precipitación en la región Metropolitana y Valparaíso (2010-2019).

“Desgraciadamente no tenemos buenas noticias”, precisó, añadiendo que a partir del 2010 en adelante ha sido “la década más seca de la historia de Chile. Tuvimos una caída promedio en la zona central del orden del 40%”.

Explicó que esto ya no se trata de una emergencia, sino que es un cambio climático que “debemos enfrentar de esa manera”.

Ante la escasez de agua, Moreno llamó a ser cuidadosos con el uso del vital elemento, afirmando que a pesar de las malas cifras “no tenemos riesgo del abastecimiento de las ciudades, gracias a las obras y medidas que se han tomado entre ellas la distribución diferente de las aguas del río Maipo”.

Por su parte, Cortés explicó que para el trimestre junio-agosto se espera una condición de lluvias normal a sobre lo normal en la Región de Coquimbo y desde Puerto Montt hasta Futaleufú.

Además, se prevén lluvias sobre lo normal para Puerto Natales, Punta Arenas y Porvenir en Tierra del Fuego.