Los diputados Cristóbal Urruticoechea y Harry Jürgensen presentaron un proyecto de ley que busca modificar la Constitución Política de la República de Chile con el fin de “prohibir toda manifestación pública que atente contra la familia, la moral y las buenas costumbres, que contenga acciones obscenas, impúdicas o con contenido sexual explícito, o que pueda causar daño físico o psicológico a niños, niñas y adolescentes”.
En este sentido, los legisladores aseguran en el escrito presentado en el Congreso que “se debe modificar el tratamiento que el artículo 19 n°13 realiza respecto del derecho de reunión, con la finalidad de que el deber de respetar el orden público, la moral y las buenas costumbres tenga un reconocimiento constitucional, y, por tanto, pueda permear a todo el ordenamiento jurídico chileno”.
Ambos diputados que hace un par de días presentaron otra iniciativa para eliminar el “Todes”, es decir el lenguaje inclusivo en las aulas.
En este sentido, Urruticoechea dijo que “queremos que se condene a aquellas performance realizadas por personas naturales o por aquellos grupos ligados a la ideología infesta del neofeminismo. Trans jugando con consoladores, gays imitando el acto sexual, lesbianas emulando y vulgarizando imágenes religiosas como la Virgen María, personas vestidas de sadomasoquismo con tocaciones y otros”.
Por su parte, el diputado Jürgensen aseguró que “ante el avance de la violencia y muchas veces desde este escenario hemos sido testigos de escenas horribles y chocantes, que atentan contra la moral y los valores que en su mayoría, las familias chilenas no quieren transmitir, ni que vean sus hijos: Creemos que es el momento de parar actos que atenten contra el desarrollo y la sana educación de nuestros hijos, como escenas públicas impúdicas, con contenido sexual explícito, muchas veces vistas en las calles y a plena luz del día”.
Por esto, el parlamentario condenó estos actos y señaló que “nuestros hijos e hijas no se lo merecen, lo que sí merecen es que sus padres y madres trabajen día a día para ofrecerles una educación sana y con contenido valórico, y a su vez, señaló, los padres chilenos merecen estar resguardados y sentir la seguridad de que en las calles sus hijos no tendrán este choque valórico”.
Finalmente, Urruticoechea precisó que “queremos que se condenen a estos activistas callejeros que lo único que pretenden es denigrar a la mujer y atacar con odio y violencia a la institución de la familia como tal, a través de actos contra sexuales”.
El proyecto
La iniciativa incorpora en el artículo 1 de la Constitución un nuevo inciso final “Se prohíben las acciones obscenas, impúdicas o con contenido sexual explícito en marchas, protestas y manifestaciones sociales”.
Así mismo, sustituye el inciso primero del artículo 19 n°13 por una nueva frase “El derecho a reunirse pacíficamente sin permiso previo y sin armas, debiendo en todo momento respetar el orden público, la moral y las buenas costumbres. Quedan prohibidas las acciones obscenas, impúdicas o con contenido sexual explícito realizadas en las plazas, calles y demás lugares públicos”.