Lo que se veía antes como una oportunidad, podía significar una trampa mortal para la economía de una persona, que al no poder sostener la inversión, se endeudaba más de lo permitido al solicitar dos o más créditos hipotecarios a la vez. Para el profesional, la clave no está en el sobrendeudamiento, ni en la cantidad de dinero que ganar una persona, si no en la falta de educación financiera, un tema del que pocos hablan y que hoy tiene a miles de chilenos sufriendo por las deudas.
En el mes de marzo la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) puso fecha tope a lo que pareciera ser el “fin de la fiesta” de los créditos simultáneos. ¿Qué significa? Que antes de esta nueva normativa, una persona podía pedir dos créditos o más en instituciones financieras diferentes, sin que éstas repararan en el “error” y comprar más de una propiedad a la vez.
Esto ocurría gracias a que en Chile existe un punto ciego entre los bancos y el ente que regula la información de todas sus instituciones, lo que ha funcionado por años y ha sido utilizado principalmente por inversionistas, quienes entraban en el negocio inmobiliario con más de una propiedad y en más de una entidad.
¿Cómo podía generarse esta situación? Una persona puede solicitar créditos hipotecarios a distintos bancos o mutuarias y recibir la aprobación de más de uno en paralelo. Al aceptar el crédito, esta información demoraba en llegar las otras entidades financieras, y era ahí donde se producía la trampa, ya que el inversionista se hacía acreedor de dos o más créditos y podía comprar más de una vivienda.
Y las consecuencias eran complejas, puesto que algunos terminaban sobre endeudados y no podían seguir pagando sus créditos, cuando dejaban de percibir el pago de los arriendos, generándose una deuda importante para el comprador. Sin embargo, hay otros, que han cumplido mes a mes con sus compromisos y para quienes este punto ciego en la ley era una real ventaja.
La nueva normativa reducirá considerablemente los tiempos de entrega de información para los bancos, haciendo mucho más difícil esta “pillería criolla”, por lo que estamos viendo el ocaso de todo este tipo de “jugadas”, las cualesgracias al avance tecnológico y un poco de voluntad, tienen los días contados.
“Todos estos cambios en nuestra comunidad de inversionistas han generado revuelo y debate, pues tenemos decenas de clientes que desde hace años vienen utilizando todas las estrategias posibles para poder asegurar un retiro digno para ellos y sus hijos. Jamás se han atrasado en un centavo en su deuda. Son alumnos ejemplares de los bancos, quienes a pesar de estar «sobre endeudados» les siguen ofreciendo más liquidez, a la vez que acumulan capital año a año mientras y que ayudan a solucionar un problema tan complejo como es el acceso a la vivienda, a través del arriendo de sus propiedades. Por otro lado, tenemos personas que ganando un sueldo menor a la media, son tentados por los bancos y casas comerciales, quienes les ofrecen tarjetas y créditos de consumo por un monto de 3 a 5 veces su ingreso. ¿Qué pasa en la mayoría de estos casos? Terminan cayendo en morosidad”, explica Rodrigo Barrientos, CEO y fundador de Gen Proactivo
EL ROL DE LA EDUCACIÓN FINANCIERA
Las preguntas ante esta nueva normativa son varias: ¿Están actuando mal los bancos? ¿Es el sistema mismo el culpable? ¿Debería regularse más esto? ¿Qué responsabilidad tiene el gobierno, el empresariado y la sociedad en su conjunto?
“Desde mi punto de vista, el factor mesiánico en este escenario fue, es y será uno solo: la educación. Y en este caso, la educación financiera. Generación tras generación hemos sido educados con formato industrial, ignorando completa y absurdamente el elemento que de forma irónica nos quita el sueño a la mayoría: el dinero. Es por eso que, creo firmemente que el problema no está en la cantidad de dinero que ganas, el que debes o la ética y moral de las instituciones. Esto se trata simplemente de formación y de romper con el tabú de lo que más nos cuesta hablar, pero que finalmente más nos hace sufrir: nuestra salud financiera”, agrega el profesional.
Para acceder a esta educación inmobiliaria y financiera, puedes visitar https://genproactivo.com/, donde podrás encontrar webinar que te ayudan a saber cómo administrar tus recursos y dónde y cómo invertir.