Por falsificación de facturas, uso malicioso de instrumento privado mercantil y malversación de caudales, la empresa chilena de aseo TMI se querelló en contra del Servicio de Salud Metropolitano Central (SSMC), el cual se ha negado a pagarle una deuda por más de $172 millones en servicios de limpieza prestados desde julio de 2018 y hasta el 30 de noviembre de 2020 (29 meses).
La firma presentó una querella criminal en contra de quienes resulten responsables, luego de que una asesoría contable identificara la adulteración y falsificación de la fecha de recepción de cuatro facturas emitidas por TMI y recibidas por el SSMC.
En la acción judicial, TMI sostiene que se percató de que funcionarios públicos del SSMC usaron timbres adulterados en las facturas de pago, para modificarlas, con el propósito de que los documentos no acreditaran la cobertura en el marco del contrato y así tener un burdo argumento para no pagarlas.
“En esos documentos se aprecia claramente como el timbre original fue borrado con corrector (liquid paper)”, acusa TMI.