Era 2011 cuando la película “Sin Límites” mostraba cómo una revolucionaria pastilla permitía aprovechar todo nuestro potencial cognitivo, situación que, en ese entonces, ni imaginábamos podría llegar a existir. Pero hoy podemos pensar lo contrario con la llegada de un innovador método no farmacológico que trae consigo múltiples beneficios para nuestras capacidades intelectuales, así como el tratamiento de enfermedades como el déficit atencional y la depresión. Se trata de la técnica Neurofeedback que Clínica Somno, centro especialista en Medicina del Sueño, trajo recientemente a nuestro país y que consiste en mejorar los patrones cerebrales por medio de un proceso integral que combina un plan de entrenamiento cerebral y el trabajo en conjunto con neurólogos y psicólogos.
“Este tratamiento es como llevar al cerebro a un gimnasio, donde una vez diagnosticado el paciente, se comienza un entrenamiento gradual para que logre un óptimo desempeño neuronal. Cualquier persona que busque una mejora personal puede beneficiarse de esta técnica, e incluso, funciona como un excelente apoyo para tratar trastornos del ánimo, autismo, crisis de pánico, déficit atencional, insomnio, entre otras enfermedades”, explica Isidora Campos, psicóloga especialista en Neurofeedback de Clínica Somno.
Este método, certificado por “Biofeedback Board Certification International Alliance” (BCIA), registra la actividad eléctrica de la corteza cerebral que es visualizada por medio de un software especializado. Durante el proceso, el paciente comienza su entrenamiento de aprendizaje con una retroalimentación auditiva y visual, a través de un juego o una película, lo que permite ir viendo el comportamiento de las ondas cerebrales que se están trabajando (Delta, Theta, Alfa y Beta).
La innovadora técnica -además de mejorar las capacidades intelectuales, emocionales, deportivas, personales y artística- funciona como tratamiento para patologías que han sido tratadas tradicionalmente con medicamentos, siendo una solución no invasiva que evidencia cambios sustanciales a partir de un número continuo de sesiones. Además, permite a los pacientes ya medicados, reducir la dosis que deben consumir gracias al desarrollo y reforzamiento de la habilidad cerebral para su propia autorregulación y buen funcionamiento.
“Al ser un tratamiento de aprendizaje gradual, la cantidad de sesiones dependerá de cada paciente, variando según la gravedad del problema, la facilidad para aprender, los resultados de la evaluación, y la motivación y constancia del paciente. El entrenamiento suele culminar en un período aproximado de tres a cuatro meses, pero los resultados ya se suelen comenzar a sentir o notar entre la primera y quinta sesión”, detalla Campos.
Clínica Somno cuenta con los tratamientos de Neurofeedback en las suscursales de Vitacura y Providencia, y sus especialistas cuentan con la certificación requerida por los organismos internacionales para llevarlos a cabo. Además forman parte del directorio de miembros en dos de los organismos más importantes de investigación y formación continua en Neurofeedback a nivel internacional, la “Sociedad Mexicana de Bio y Neurofeedback” (SMBN) y la “Sociedad Internacional de Neurofeedback e Investigación” (ISNR).