Un tiroteo registrado el sábado en un centro comercial de El Paso, Texas, dejó 20 muertos y 26 heridos, según las autoridades de esta ciudad del sur de Estados Unidos, que detuvieron a una persona e investigan el incidente como posible crimen de odio.
«Veinte personas inocentes de El Paso perdieron la vida», dijo el gobernador de Texas, Greg Abbott, en una rueda de prensa.
Por su parte, Greg Allen, jefe de la policía de El Paso, ciudad en la frontera con México, indicó que hay 26 heridos y que «un hombre blanco de 21 años» fue detenido.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo que tres mexicanos murieron en el incidente, en tanto la Cancillería de ese país informó de seis heridos.
«Mis condolencias a los estadounidenses que perdieron la vida, a los mexicanos que perdieron la vida, es muy lamentable este hecho, conozco El Paso, Texas, sé que es un lugar muy pacífico, de los condados con menos violencia en Estados Unidos», dijo el mandatario mexicano.
Medios locales identificaron al sospechoso como Patrick Crusius, que vive en el área de Dallas, Reseña AFP.
Según Allen, el tiroteo se investiga como «un posible vínculo con un crimen de odio», pues un manifiesto atribuido al sospechoso y que circula en internet denuncia una «invasión hispana de Texas».
El Paso es vecina de la mexicana Ciudad Juárez, en el estado de Chihuahua, y sus habitantes mantienen una intensa dinámica social y comercial, con ciudadanos de ambos lados yendo y viniendo para trabajar, estudiar o hacer compras.
El tiroteo comenzó a media mañana cerca de un local de la tienda Walmart, provocó pánico en la zona comercial más grande de la ciudad, repleta por el fin de semana.