Las crecientes inversiones de China en Chile y la intención del país asiático de aumentar las importaciones extranjeras anticipan un futuro próspero y beneficioso para los habitantes del país sudamericano, coincidieron expertos en economía y finanzas reunidos este martes en Santiago.

China es ahora el primer socio comercial de Chile, lo que contribuye a su equilibrio y estructura comercial, además de ofrecer condiciones favorables al intercambio y oportunidades a las empresas locales, señaló en un discurso el consejero económico y comercial de la Embajada de China en Chile, Liu Rutao.

El consejero y otros analistas participaron en un seminario que abordó el escenario actual de las inversiones bilaterales China-Chile, que destacó el aporte que ha significado la longeva relación diplomática entre los dos países, que cumplirá 50 años en 2020.

China se ha convertido en el principal destino de exportaciones y la mayor fuente de importaciones de Chile, con envíos al país asiático que alcanzaron los 25.300 millones de dólares en 2018, e importaciones a Chile desde China por valor de 17.500 millones de dólares, según la Embajada.

«El valor de China reside en que cuenta con la demanda y el mercado más grande del mundo. Cualquier producto que sea aceptado por el mercado chino significará para el país productor divisas de gran volumen y altos beneficios», advirtió el funcionario, con relación a la expansión de la clase media, que suma 400 millones de personas.

La atención de las inversiones chinas, en tanto, se ha concentrado en los últimos diez años en el sector energético y recursos, la banca y las áreas financieras, y el rubro del consumo y las telecomunicaciones, con capitales que ascendieron a cinco millones de dólares en 2018.

Estas cifras posicionaron a Chile como el principal receptor de las inversiones chinas en Latinoamérica, impulsado por la compra del 23,77 por ciento de las acciones de la minera no metálica SQM por parte de la empresa china Tianqi, por 4.100 millones de dólares, explicó en su presentación el socio de M&A de Deloitte, Pedro Castelló.

China y Chile «son socios estratégicos en distintas áreas de negocio, creciendo con acuerdos de cooperación, la apertura al intercambio comercial y tecnológico», para impulsar la alta conectividad y continuar estrechando lazos, afirmó en su intervención Ricardo Briggs, director regional de Deloitte Chile, firma que organizó el encuentro.

El presidente del Directorio de la Cámara Chileno-China de Comercio, Industria y Turismo (CHICIT), Juan Esteban Musalem, evaluó en su exposición lo «importante» que es para Latinoamérica la presencia china, que «avanza hacia un crecimiento sustentable, respetuoso del medio ambiente».

Musalem mencionó que la renovada estrategia económica del país asiático se sustenta con el aumento del consumo interno y el fuerte énfasis que han adquirido los servicios, además de la «lucha paralela» contra la pobreza y la corrupción.

Los expertos presentes consideraron el desarrollo que han tenido las empresas y aplicaciones creadas en China, como Wechat, Alibaba, Mobike y DIDI Chuxing, próxima en arribar a Chile.