Entre el 31 de enero y 19 de febrero fueron admitidos a tramitación en el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) tres proyectos salmoneros que pretenden emplazarse en la Reserva Nacional Kawésqar, la cual protege la zona marino costera del también Parque Nacional Kawésqar, ambas áreas recientemente decretadas a través de D.S N°6/2018 del Ministerio de Bienes Nacionales del 30 de enero del presente año.
Los proyectos corresponden a tres centros de engorda de salmónidos, uno por iniciativa de la empresa Inversiones Pelícanos Spa y dos de Acuícola Cordillera, los cuales se ubicarían en las cercanías de los fiordos de Isla Riesco, en la comuna de Río Verde, afectando así el área resguardada por la figura de Reserva Nacional Kawésqar.
La dimensión de los proyectos abarcaría la instalación de 84 balsas jaulas en total, distribuidas en 48 balsas en el “Centro de engorda de salmones Golfo Xaultegua”, 16 en el “Centro de engorda de salmónidos Estero Pérez de Arce” y 20 en el “Centro de engorda de salmónidos Ensenada Colo Colo”; produciendo en total alrededor de 22.600 toneladas de salmón por ciclo.
La presentación de estos proyectos acuícolas alertó a Fundación Terram, organización que advierte que una de las carencias ambientales de las firmas es la forma en que ingresaron las iniciativas al SEIA. Ignacio Martínez, abogado de la entidad, señaló que “nos llama profundamente la atención que los tres proyectos hayan ingresado a través de una Declaración de Impacto Ambiental, siendo que la ley (N°19.300, Ley sobre Bases Generales del Medio Ambiente) en casos de proyectos que se emplazan al interior de áreas protegidas, en este caso la Reserva Nacional Kawésqar, deben ingresar a través de Estudios de Impacto Ambiental”.
Por su parte, el dictamen Nº83.278 de 2016 de la Contraloría General de la República señala que el desarrollo de actividades de acuicultura en zonas marítimas que formen parte de las Reservas Nacionales solo puede ser autorizadas, siempre y cuando, sean compatibles con sus respectivos objetivos de conservación; el problema es que “en este caso no se cuenta todavía con plan de manejo, de manera que no tenemos los objetivos de conservación claros especificados en el plan, ni tampoco se encuentran en el decreto de creación que crea dicha área”, enfatiza Christian Paredes, también abogado de la institución.
Si bien las tres iniciativas aún se encuentran en el proceso de calificación ambiental, desde Fundación Terram señalan que estos están incumpliendo la normativa ambiental vigente como lo expresado por Contraloría. Es por ello que esta institución hace un llamado a la autoridad ambiental a rechazar los tres proyectos ingresados a SEIA durante los últimos meses.