El Frente Amplio salió este jueves a ponerle la lápida a la idea del canciller Roberto Ampuero de reunirse con opositores venezolanos y demócratas chilenos para analizar lo que fue la experiencia de la transición a la democracia que vivió Chile.
En ese sentido, la vocera del Movimiento Autonomista, Stephanie Peñaloza, fue tajante al señalar que no se pueden comparar los históricos que enfrentó el país para el retorno a la democracia y la crisis que atraviesa Venezuela.
“No se puede comparar los momentos históricos, creo que lo que pasó en Chile es lamentable y que responde a otro contexto histórico. No viene al caso compararlos”, precisó.
Al respecto precisó que la idea es que el Gobierno esté dispuesto para hablar con todas las partes del conflicto venezolano.
En tanto, el timonel del Partido Liberal, Luis Felipe Ramos, dijo que “nos llama la atención que el Gobierno esté pensando en este momento en la transición chilena, ya que fue su bloque el que más hizo difícil esta transición en nuestro país”.
Los dirigentes del FA llegaron hasta el palacio de La Moneda para entregar una carta en la que cuestionan la posición asumida por el Gobierno del Presidente Sebastián Piñera, debido a que estiman que no contribuye a la generación de un cuadro de diálogo.
En la misiva, los dirigentes exponen que “nos parece que la posición adoptada por el gobierno chileno no contribuye a la generación de un cuadro que permita a nuestro país mediar en el conflicto, más bien daña nuestra posición internacional desde el punto de vista de la imparcialidad necesaria para abordar un rol significativo en el escenario internacional. Creemos urgente enmendar dicha línea y retomar la senda de la intermediación y el diálogo de las partes en conflicto. El gobierno de Chile, más que tomar una posición respecto del gobierno venezolano, debe tomar la iniciativa de potenciar el diálogo y el respeto por el derecho internacional y sus acuerdos, tal como lo han planteado los gobiernos de México y Uruguay”.
Y añaden que “la línea actual de su gobierno allana el camino hacia una guerra civil o a una eventual intervención extranjera, lo que es de suyo contradictorio con el principio de solución pacífica y de autodeterminación que subyace en el ordenamiento jurídico internacional y que nuestro país proclama defender”.
Además, el FA critica la inasistencia de Chile a la Conferencia en Uruguay, ya que consideran como “un gran error diplomático” que puede corregirse “en la medida que el gobierno adopte una posición firme, neutral e independiente a la línea de actuación de potencias extranjeras, apoyando los acuerdos de diálogo que surjan de esa instancia”.
Hay que recordar que la instancia que se realiza en Uruguay, el Gobierno chileno no quiso participar porque había condicionado su asistencia a elecciones a la brevedad en Venezuela.
Además, el canciller Ampuero ya viene desde hace un tiempo endureciendo su tono en contra del Presidente Nicolás Maduro, ya que lo trató de dictador y no de demócrata.
«No es un demócrata extraviado, es un dictador. No concibe que tenga que entregar el poder, y él mismo lo anunció, que desea quedarse hasta el 2025«, explicó en ese momento el jefe de la diplomacia chilena.
Asimismo, el vocero de La Moneda (s), Emardo Hantelmann, explicó que la idea planteada por el canciller Ampuero es dar “conocer el proceso que determinó que Chile lograse tener una democracia” y preparar un plan de transición en paralelo a las medidas que se están adoptando para avanzar hacia elecciones “libres” en Venezuela.