Un accidente puede pasar en cualquier momento, es por eso que es de vital importancia prestar atención a la información que aquí se entrega, para que las vacaciones no se transformen en una pesadilla de resultar alguien de la familia con una quemadura.
a.- Quemaduras de Primer Grado
Si las quemaduras son superficiales y no forman ampollas, se puede decir que son de primer grado. La atención en estos casos, para disminuir los daños, es poner la parte quemada en agua fría, no usar hielo, ya que puede aumentar el daño. En caso de que el dolor continúe, es necesario tomar algún analgésico y acudir al médico.
b.- Quemaduras de Segundo Grado
Cuando hay aparición de ampollas, se trata de quemaduras de segundo grado. Algo muy importante en estos casos es mantenerla limpia y protegida, para evitar, evitar infecciones, pues mientras la piel cubra la parte quemada, los microorganismos están aislados; cuando esta barrera se rompe queda la puerta abierta para que la herida se infecte.
En caso de que las ampollas se hayan reventado, es necesario, con las manos limpias, lavar cuidadosamente la zona con agua limpia y fría (hervida, de preferencia) y acuda inmediatamente a un servicio médico. De no poder hacerlo, se debe cubrir la zona con un apósito estéril hasta ser evaluado por un médico a la brevedad. Es clave el manejo por el profesional lo más pronto posible y no untar ningún tipo de grasas, plantas, excremento de animal, café, etcétera, sobre la quemadura, para evitar infecciones.
c.- Quemaduras de tercer grado
Son profundas y destruyen la piel, por lo general la zona se ve blanquecina y acartonada o negruzca por el fuego. Estas requieren de atención médica inmediata porque la vida de la persona peligra. Mientras tanto, envolver la quemadura con un trapo muy limpio, empapado con agua.
“Estos son sólo algunos consejos, pero en caso de sufrir quemaduras, por ejemplo, en un incendio o con agua hirviendo en una zona extendida, lo mejor es acudir al médico para que éste de un diagnóstico certero y su respectivo tratamiento”, puntualizó el doctor Esteban Torres.