Una de las instituciones más afectadas con los incendios de enero de este año fue la compañía de Bomberos de Santa Olga, en la región del Maule, donde los 20 voluntarios perdieron todo y se han sostenido con la ayuda de famosos, privados y algunas organizaciones que les han colaborado a mantener el trabajo durante el año.
Actualmente, operan en dos containers ya que el cuartel fue devastado por el incendio y no está contemplada, por ahora, la construcción de un edificio nuevo dentro del programa de restauración del pueblo.
Gran parte de sus implementos de trabajo también se perdió en los incendios, razón por la que la marca chilena de zapatos de seguridad Norseg se contactó con ellos, para conocer sus necesidades y entregar un aporte significativo a los integrantes de la compañía.
“Esta acción para nosotros es muy emotiva después de tanto tiempo ocurrida la emergencia, ya que prácticamente la gente se ha ido olvidando de nosotros. Es complicado porque ya están comenzando los incendios y necesitamos cuidar a nuestra gente, y sin la ayuda de los demás está difícil. Esta actividad nos deja muy contentos como compañía y grupo de bomberos de la localidad”, explicó Carlos Hernández, Director de la Quinta Compañía de Bomberos de Santa Olga.
Andrés Infante Güell, Gerente Comercial de Norseg, señaló que “luego de los grandes incendios del verano pasado ocurridos en la zona centro sur, y particularmente en Santa Olga, quisimos comprometernos con ellos aportando con nuestros productos que ayudarán a los voluntarios a estar un poco más protegidos. Con esta acción esperamos que otras empresas también se motiven a colaborar y hagan sus donaciones para que esta institución pueda estar mejor preparada para combatir los incendios de la temporada de verano que recién comienza.”
Los zapatos Norseg están certificados bajo la norma chilena, destacando entre sus características las punteras de protección, suelas de goma antideslizante y otras tecnologías que los hacen seguros para sortear distintos escenarios, no sólo en el trabajo sino también en la vida cotidiana.
El Director del Departamento de Desarrollo Comunitario (DIDECO), Alejandro Palavecino, señaló que “este tipo de ayudas vienen del cielo, ya que son un aporte significativo de productos de muy buena calidad. Pero también en el sentido emocional, el hecho que haya empresas que se preocupen de gente que sacrificadamente están atentos a atender emergencias como las vividas en enero de este año es súper importante. Junto con el Alcalde Carlos Valenzuela y la comunidad le agradecemos por estar presentes con ayuda que marca la diferencia”.
Durante la actividad los voluntarios recibieron también una capacitación para que conocieran las características, el uso y cuidado correctos de los calzados de seguridad recibidos.
