Luego que el ministro de Justicia, Jaime Campos, pusiera en duda el cierre del penal de Punta Peuco como la promesa hecha por la Presidenta Michelle Bachelet, y aseguró no haber leído la carta pública de Carmen Gloria Quintana, en la que le pidió disculpas porque el secretario de Estado la tratara de “esta señora”, ahora el secretario de Estado moderó su discurso. Sin embargo, la Agrupación de Detenidos Desaparecidos (AFDD) pidió su renuncia al cargo.
A su llegada al Ministerio de Justicia y consultado por la prensa sobre la carta de la sobreviviente del caso Quemados, el funcionario de gobierno dijo enfáticamente, «no la he leído«.
En cuanto al cierre de Punta Peuco, lugar donde cumplen condenas los violadores a los derechos humanos, señaló que «cuando tengamos algo que decir, como se lo vengo diciendo desde hace un año, se lo vamos a informar. Esta es una materia que el Gobierno, y particularmente el Ministerio, la está estudiando y trabajando desde que yo asumí, pero hasta el día de hoy no hay ninguna resolución«.
Además, el secretario de Estado respondió a la petición de renuncia de algunos parlamentarios por los dichos del miércoles, indicando que «los ministros dependemos de la Presidenta de la República, no de los parlamentarios«.
AFDD pide la salida de Campos
En tanto, la AFDD pidió su salida del Ministerio y se puso en línea a la petición hecha por el Partido Comunista, quien también exigió la renuncia de Campos.
La presidenta de la agrupación, Lorena Pizarro, dijo que el gobierno debe cumplir con el cierre de esa cárcel, debido a que es un compromiso adquirido por la mandataria a Carmen Gloria Quintana, indicando que resulta una “vergüenza inaceptable” que el Ministro de Justicia ponga en duda la palabra de la jefa Estado.
En ese sentido, aseguró que “más que promesas, aquí hay un programa que no se ha cumplido (…) Estamos emplazando al ministro a que el renuncie, a que el abandone su responsabilidad en la cartera. El ministro es el interlocutor con las organizaciones de derechos humanos, es quien se hace cargo en avanzar y agilizar la agenda de derechos humanos, pero el ministro de Justicia desde el día uno que llegó ha relativizado el terrorismo de Estado, ha ninguneado los tratados internacionales de derechos humanos“.