Con un contundente y transversal apoyo de diez votos a favor fue aprobado en general, por parte de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, el proyecto que actualiza la normativa bancaria imponiendo mayores exigencias a las instituciones conforme a los más altos estándares internacionales.
El presidente del grupo parlamentario, diputado José Miguel Ortiz (DC), se manifestó muy conforme con el resultado y adelantó que el análisis en particular será retomado el miércoles 6 de septiembre, de modo de dar tiempo para la elaboración de las indicaciones que están siendo consensuadas en una mesa, en la que participan representantes del Ejecutivo y de los parlamentarios de gobierno y oposición.
“La mesa técnica está buscando consenso para mejorar y perfeccionar, como siempre lo hacemos con los proyectos aquí en la Comisión de Hacienda, para que se resguarde el bien del país y la seriedad y responsabilidad que tiene la banca chilena, pero también con esto que hemos incrementado con Basilea III”, informó Ortiz.
El parlamentario sostuvo que todos los temas están siendo abordados en esta instancia, tratándose de llegar a acuerdos, inclusive en torno a la situación de los funcionarios de la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (SBIF), que pasará a integrar a la nueva Comisión para el Mercado Financiero (CMF).
En la oposición también se reconoció el esfuerzo por alcanzar consensos y, según especificó el diputado Ernesto Silva (UDI), los temas ya están medianamente perfilados.
“Los principales cambios están en cómo se aplica el aumento de capital en algunos casos, que se llama el Pilar II, y las reglas del juego para eso y también en el funcionamiento de la Comisión. Los otros aspectos centrales tienen que ver con concretar que la transición para implementar esta legislación sea concretamente seis años después de publicada la ley y no seis años desde ahora, como estaba contemplado originalmente. Eso, sumado a una mejor fusión de la Superintendencia con la Comisión de Valores, en un periodo de dos años y de dictar reglas, genera mejores condiciones para que este proyecto se implemente de muy buena forma”, comunicó.
El legislador explicó que este periodo de seis años permitirá llevar a buen efecto, en su primera fase, la fusión de la SBIF con la actual Comisión de Valores, para conformar la CMF. Luego, facilitará la dictación e implementación de los reglamentos respectivos para, finalmente, pasar a exigir el cumplimiento de los nuevos requisitos de capital a las instituciones bancarias, conforme a los acuerdos de la organización internacional de Basilea III.
“Eso se va a aplicar a todos, pero con realidades diferentes, porque hay bancos a los cuales se les va a exigir más capital que a otros, dependiendo del riesgo que pueda significar para el sistema o la situación que puedan enfrentar en un determinado momento”, detalló.
Recordemos que el proyecto se plantea en tres grandes líneas:
1. Fortalecer el gobierno corporativo del regulador y crear un marco institucional armónico para la supervisión y regulación financiera a cargo de la nueva Comisión para el Mercado Financiero.
2. Aumentar la resiliencia del sistema bancario, adecuando los requisitos de capital a los estándares de Basilea III y aumentando los límites de cobertura estatal a los depósitos.
3. Dotar al regulador con herramientas que permitan prevenir problemas de liquidez y solvencia en bancos.